Las matrimoniadas de Sánchez e Iglesias pasman al estupefacto votante

La "nueva política" se disputa en los platós de televisión y en las redes sociales, a juzgar por el penúltimo episodio que protagonizaron este domingo el líder del PSOE y el líder de Podemos. Después de varios dimes y diretes, y declaraciones cruzadas, por la tele y por Twitter, finalmente Pedro Sánchez y Pablo Iglesias conversaron por teléfono a última hora de la tarde por primera vez después de la oferta lanzada por el segundo para formar un Gobierno "plural y progresista". La conversación fue cordial y ambos se emplazaron a seguir los contactos en los próximos días, coincidiendo en la necesidad de llegar a un acuerdo para formar un Gobierno "de cambio progresista".

En un comunicado conjunto hecho público tras la conversación de unos 20 minutos, Iglesias insistió en la importancia de "no dilatar más en el tiempo" la formación del próximo Gobierno y el secretario general socialista le dijo que, antes del reparto de puestos en el Ejecutivo, tienen que llegar a un acuerdo sobre las políticas que impulsarán desde esta hipotética coalición. 

Claro que la forma en la que se produjo la conversación dio para mucho jolgorio en las redes sociales, que se llenaron de bromas y guasas en relación a las "matrimoniadas" de ambos líderes políticos y en algo tan serio como decidir el próximo Gobierno del país. Y es que la conversación se llevó a cabo después de que Iglesias se quejara el sábado por la noche en La Sexta que Sánchez sólo le había mandado un "whatsapp" y publicara un artículo de prensa este domingo por la tarde defendiendo el acuerdo y, a su vez, Pedro Sánchez publicara en Twitter que no había conseguido "aún" hablar con el líder de Podemos porque no le había cogido el teléfono. Acto seguido, y seguramente alertado por este mensaje en la red de microblogging, Iglesias llamó a Sánchez y finalmente hablaron. Normal, que muchos tuiteros se burlaran asegurando que la próxima vez debían contactar por eDarling.

Y después del culebrón, eso sí, la primera toma de contacto tras la oferta lanzada el viernes por Podemos cuando el líder del PSOE era recibido en audiencia por el Rey. En la conversación, Sánchez mostró a su interlocutor su "desagrado" por la forma en que pidió una vicepresidencia y varios ministerios estratégicos como condición para firmar un pacto.

   Iglesias insistió en que, "por encima de todo", lo importante es que haya un "gobierno de progreso". Sánchez, por su parte, le dijo que él está dispuesto a hablar con todas las fuerzas políticas que quieran "un cambio progresista y reformista", aunque, en línea con lo anterior, pidió que primero se hablen de políticas y luego de sillones.

   En el comunicado conjunto, Iglesias también apuesta por el diálogo "con las fuerzas que no comparten la hoja de ruta del PP" y subraya la importancia de "no dilatar más en el tiempo" la alternativa al Gobierno de Mariano Rajoy. Además, insiste en que el Ejecutivo presidido por Pedro Sánchez tiene que contar con ministros de Podemos e IU con un peso proporcional a los resultados del 20 de diciembre.

   La prioridad, según Iglesias, es apostar por "políticas económicas redistributivas" y por la "plurinacionalidad", eludiendo hacer mención explícita al referéndum que defienden desde su partido como respuesta al proceso independentista en Cataluña.

   Sánchez mostró su "indignación" por el uso partidista que ha hecho el Partido Popular de las instituciones tras declinar el encargo del Rey para presentar la candidatura de Mariano Rajoy en el Pleno de investidura del Congreso de los Diputados. "Se puede dar un paso o al frente o atrás, pero nunca al lado", defendió.