| 19 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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Sandra Golpe, muy dura con Sánchez en su artículo de "La Razón".
Sandra Golpe, muy dura con Sánchez en su artículo de "La Razón".

La bofetada simbólica de Sandra Golpe a Pedro Sánchez constata su hoja de ruta

La periodista hunde la imagen del presidente del Gobierno con una batería de preguntas y sus respectivas respuestas que no le deja en demasiado buen lugar. Sabe quién sale ganando.

| I. D. Medios

Es, inevitablemente, el asunto del viernes en las columnas y análisis de opinión y no es para menos. "La cumbre bilateral España-Cataluña" con "los máximos honores, las banderas española y catalana en la sala, los mossos de gala, la solemnidad propia de las citas oficiales, lo pomposo del ceremonial, lo simbólico y lo anecdótico".

Normal que Sandra Golpe concluya en su columna de La Razón que si lo que quería La Moncloa era diluir la importancia del encuentro entre Pedro Sánchez y el inhabilitado Quim Torra, "le ha salido el tiro por la culata".

A su juicio, muchos en el PSOE de antes de Pedro habrían preferido que su presidente cancelara la visita, que no se hiciera esa foto, pero nada, porque el PSOE de después de Pedro necesita cumplir con determinados trámites impuestos por ERC a cambio de gobernar.

Sea como fuere Golpe tiene claro que las formas importan y mucho, al igual que los mensajes lanzados, cuando uno se reúne con un presidente inhabilitado y "la puesta en escena fue más propia del recibimiento a un mandatario extranjero que a tu presidente del Gobierno" y eso que, agradece, por lo menos Pedro Sánchez no agachó la cabeza al saludar a Quim Torra.

Más sorprendente aún le pareció a la periodista el intercambio de libros en público que "se podrían haber ahorrado, para no herir más sensibilidades". De hecho, se pregunta en voz alta "¿con qué autoridad ese president que ha despreciado al Estado español en repetidas ocasiones puede regalarle a su invitado dos obras sobre los derechos humanos? ¿Qué estaba transmitiendo con ese gesto?".

Para Golpe "frente a esa bofetada simbólica, el presidente del Gobierno insistió en la idoneidad del reencuentro, en su agenda con 40 medidas, en una mesa de diálogo inminente" pero al cuestionar "Para qué ha servido esta reunión" sentencia que en la práctica, "para constatar que Pedro Sánchez sigue adelante con su hoja de ruta" y que "quién sale ganando" no es "tanto la sociedad española o catalana como los políticos que nos gobiernan. Los de allí y los de aquí".