Ximo Puig se contagia del virus catalanista de Compromís y exige un país propio

El socialismo valenciano quiere emular a sus homólogos de Cataluña apostando por la vena más nacionalista de su ideario político para intentar mantener otros cuatro años el Pacte del Botànic (ahora gobiernan con Compromís). 

Tras la victoria en las primarias de Ximo Puig sobre el "sanchista" Rafael García, el panorama se despeja para los discípulos del presidente de la Generalitat, que ahondan más en la crisis del PSOE por tener un discurso diferente para cada región. Aunque está claro que se acercan a las tesis más "catalanistas" del PSC.

Si uno analiza parte de la ponencia que va a presentar al 13 Congreso del PSPV-PSOE a finales de este mes en Elche, comprueba cómo se sigue apostando por ser un partido socialdemócrata, al menos por ahí sí son coherentes; por un federalismo asimétrico, es decir, que se unirá o pactará con cualquiera, incluso separatistas; con autonomía propia frente a Ferraz, en una clara alusión a su enfrentamiento con Pedro Sánchez; y con un perfil "valencianista", o sea, entregado a la causa que defiende Compromís, que es una amalgama de siglas donde existen partidos plenamente identificados con el independentismo catalán.

La dialéctica de la ponencia es propia del PSC. ¿Acabará el PSPV como sus vecinos catalanes?

En unos de los párrafos de la ponencia indica que, aparte de las reivindicaciones de siempre: mayor financiación ,más autogobierno, la finalización del Corredor Mediterráneo..., quieren la constitución como nacionalidad histórica y la construcción de un proyecto de "Pais Valencià". Hablan de que pretenden alejarse de posiciones sumisas en una dialéctica propia de sus vecinos del norte, que tanto dolores de cabeza ha creado en Ferraz. A este paso, si no lo son ya, se van a convertir en una máquina de perder votos como ya le ha sucedido al PSC.  

Pero hay más. Entre las perlas que se lanzan en el documento está: "Todos somos valencianos y tenemos que confluir en una identidad que construya un proyecto de país en conjunto", matiza el texto que se expondrá en próximo 28 de julio en Elche. Toda una declaración de intenciones.

Esta "valencianización" del PSPV se dirige a captar el voto nacionalista más moderado de Compromís, su actual socio de gobierno. Es una táctica parecida a la utilizada ya por Pedro Sánchez con Podemos. Radicaliza más su discurso para recuperar votos que ahora están en el saco de Pablo Iglesias. De momento es una declaración de intenciones, pero no deja de ser sintomático que se explore una una vía con una música una parecida al fenómeno nacionalista-separatista catalán.

Además, hay un apoyo tácito a la política que está realizando el Consell. Se defiende el plurilingüismo, hay un ataque a la enseñanza concertada y una defensa de la sanidad pública. 

No se hace referencia al proyecto común de este país reflejado en la Constitución de 1978. Se incide en el localismo en un momento clave en la historia de este país, con el desafío independentista catalán a la vuelta de la esquina. Pero es lo que hay, la Comunidad Valenciana se puede convertir en otra Cataluña si a los socialistas se les va la mano con su giro a posiciones plenamente nacionalistas.