| 28 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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María Teresa Campos atraviesa un momento muy complicado
María Teresa Campos atraviesa un momento muy complicado

Teresa Campos toca fondo: su situación anímica preocupa y alerta a sus hijas

La presentadora no puede ocultar que está pasando el peor momento de su vida. Las últimas circunstancias han obligado, incluso, a que su hija Terelu reconozca que algo va mal.

| ESchismógrafo Chismógrafo

María Teresa Campos tiene un problema con Bigote Arrocet, y es que no puede controlarlo. A ella le gustaría que el humorista fuera más dócil y estuviera siempre a su vera, haciendo lo que ella quisiera. Sin embargo, él es indomable y se mueve a su antojo. Incluso cuando van juntos, como ocurrió hace poco en un aeropuerto, que la presentadora se enfadó al ver que su chico había desaparecido de su radio de acción. 

No es ningún secreto que a María Teresa le gusta tenerlo todo controlado. Y más ahora con Bigote, una relación que le provoca una gran desasosiego por todos los comentarios que origina. En parte, también ella tiene algo de culpa, pues hace partícipe de los enfados con su chico a su círculo más íntimo. Es ahí donde todo indica radica el origen de que sus hijas, Terelu y Carmen, no hablen bien del humorista por detrás. Lo mismito que las amigas de la presentadora, tal y como contamos en exclusiva en EsChismografo. Y es que Teresa debería morderse la lengua cuando está de uñas con su novio porque dice cosas que provocan malestar en los suyos. La gente habla y todo llega a los medios.

Esta Semana Santa, las Campos arropan a su madre. Están realmente preocupadas porque saben que atraviesa un momento horrible. Entre que Paolo Vasile ha cancelado su ¡QTTF!, el fichaje de Toñi Moreno para sustituirla en la franja de fin de semana que hasta ahora era suya, el hecho de que se esté aireando el pasado más comprometido de su hija Carmen, la desconfianza que ya anida en su interior en relación a las intenciones de Bigote y todo lo que sobre ella y sus hijas están diciendo, la periodista ha tocado fondo. Ya no puede más. Sabe que, por su parte, es imposible frenar el tsunami que se le ha venido encima. Perdió su corona, y con ella, el poder y la influencia en los medios. A pesar de este mal momento, Terelu y Carmen han conseguido que su madre viaje a Málaga. Fieles a su tradición, observan las procesiones desde las ventanas del hotel Molina Lario. Un cuatro estrellas donde solo dormir cuesta 154 euros. Existen diferentes paquetes y, en caso de estancias largas, se ofrece un descuento del 10%. Está claro que a María Teresa le gusta mantener el ritmo de vida que siempre ha disfrutado. Sin embargo, sorprende que no modere el gasto pues tiene una abultada deuda con Hacienda, 800.000 euros. De ahí que se deshiciera del ático dúplex que adquirió en la misma urbanización donde vive su hija Terelu. Una propiedad de 730 m2 que Teresa se gastó 300.000 euros en reformar. En un principio, el precio de venta era de 1.400.000 euros. Sin embargo, no le quedo otra que rebajar la cantidad por su necesidad de liquidez.

Si algo no quería María Teresa era que Bigote participara en Supervivientes. En los inicios de su relación, el humorista estaba dispuesto a ir, le habían hecho una más que jugosa oferta, pero la periodista consiguió convencerlo para que se quedara en casa. En esta edición, no ha sido posible. Arrocet tenía claro hace meses que iba al reality pues también él está cansado de que su chica intente manejar sus temas profesionales y solo de el visto bueno a los proyectos en los que ella participa. Bigote quiere aprovechar la ocasión y ganar dinero. Su caché es de 30.000 euros a la semana, no 24.000 como se ha dicho. El máximo que paga la productora a los concursantes. El humorista se echa a la espalda los comentarios que sobre él hacen. Sabe lo que quiere y va directo a ello. Sin embargo, no ocurre lo mismo con Teresa. Su propia hija ya ha dado la voz de alarma al confirmar que "mi madre está regular".