BMW cumple 1 siglo como pieza clave de la industria automotriz

Fue el pasado 7 de marzo a las 14h cuando BMW dio la orden a sus más de 30 fabricas repartidas por todo el mundo de que paralizaran por completo su producción. Hacia 100 años exactos que un grupo de empresarios había fundado la Bayerische Motorenwerk (Fabrica de aviones de Baviera) y tenían que conmemorarlo. Hoy más de 120.000 empleados consiguen que facture 80.000 millones al año y es uno de los orgullos del entramado empresarial alemán, mientras que a sus ingenieros debemos muchos de los avances que disfrutamos en el sector de la automoción.

Para celebrar esta efeméride muchos van a ser los actos que se van a celebrar en las distintas sedes de la marca repartidas por los 5 continentes, como la preciosa exposición retrospectiva que ya se puede visitar en BMW Madrid y que Borja Hormigos, responsable de comunicación de la marca, nos detalla en el video que acompaña a este artículo, pero hay un hecho que va a marcar por completo este aniversario, y es que ya están pensando en los próximos 100 años, cuya base va a ser muy tecnológica, con la conducción autónoma como centro neurálgico de ellos.

Así lo afirmaba el consejero delegado del grupo, Harald Krüger, en la presentación del prototipo Vision next 100 Years, un nuevo coche con el que pretenden revolucionar el sector del automóvil. Se trata de un prototipo de lujo que utiliza la tecnología ya vista en el BMW i8 y la lleva un paso más allá. No tiene volante ni consola central, y su interior prima el confort, con asientos que pueden girar 180 grados. BMW es historia viva de la automoción, y aunque algunos se emocionan viendo una R32 con la que comenzó su andadura en las dos ruedas, un Dixi 3/15 con el que en 1928 se lanzo al mundo de las 4 ruedas, un cotizadísimo BMW 507 o un simpático Isetta, hay razones de sobra para mirar al futuro con la misma ilusión.