Tremendo corte el que se llevó la actriz en vivo y en directo y ante la atenta mirada de las siempre curiosas cámaras que la siguen a todas partes. No salía de casa y cuando sale... esto.
Igual que muchos españoles, Paula Echevarría aprovechó este fin de semana las medidas de la desescalada interpuestas por el Gobierno para acudir a la peluquería, acudiendo a su centro de confianza. Sin embargo, el que debía ser un momento de placer se vio marcado por la polémica y el bochorno.
La actriz llegó al madrileño centro de estética con mascarilla y manteniendo las medidas de precaución contra la propagación del contagio del COVID-19. Una de ellas es la del número de personas que pueden estar dentro del centro, por eso mismo cuando Paula llegó al centro había otra cliente esperando en la puerta.
Sin embargo, como si no la viese, ella fue a entrar directamente al centro, avisándole la señora de que tenían que esperar fuera y que ella también tenía cita. Como no podía ser de otra manera, la clienta se quejó: "Hay que esperar".
Un gesto que además se criticó mucho desde el Socialité de María Patiño en Telecinco, donde se emitieron las imágenes. Eso sí, después de un largo tiempo dentro del establecimiento, Echevarría salió luciendo su mejor versión y aun más favorecida que cuando entró al centro.