Marhuenda destapa la decisión secreta de Sánchez de "detener a Núñez de Balboa"

Ni límites en su acción de gobierno ni críticas a su gestión. Así parece conducirse el Ejecutivo de Pedro Sánchez a tenor de la controvertida deliberación del Consejo de Ministros que ha logrado destapar y dar a conocer Francisco Marhuenda: ni más ni menos que "detener a Núñez de Balboa".

Se trata, claro está, de una parodia aunque la divertida descripción que realiza el director de 'La Razón' en su última columna bien podría tener fundamentos reales, incluida confundir la calle madrileña con un personaje real, una suerte de cabecilla 'facha' al margen del histórico conquistador español.

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"En la última reunión del gabinete Sánchez-Iglesias, el ministro de Ultramar estaba inquieto por las protestas y planteó que se tenían que tomar medidas draconianas", es el disparatado arranque del artículo, añadiendo que "por ello, exigió la detención y encarcelamiento de Núñez de Balboa. Este antiguo director de Pijos Progres sin Fronteras, una de las ONG’s más prestigiosas de nuestro país, se encaró con el ministro de Gobernación Interior, un juez que esperaba ser Fiscal General con la pérfida derecha hispana hasta que se cayó del caballo".

Existieron reservas, eso sí, en ese disparatado consejo: "El sector más a la izquierda apoyó con fervor la detención, porque su apellido delataba a un aristócrata. El titular de Comercio Interior, a pesar de su origen pudiente, aclaró que llevando un 'de' en su apellido no había ninguna duda. Es cierto que la vicepresidenta de la Memoria Verdadera precisó que había aristócratas que no llevaban esa incómoda partícula en su apellido, aunque se sumó a la propuesta con el ministro secretario general del Movimiento Socialista.

La "Spanish Revolución"

Todo fueron dolores de cabeza en esa reunión, con el dichoso crítico Núñez de Balboa, "empeñado en manifestarse todos los días contra el estado de alarma y la gestión de la crisis sanitaria en lugar de estar agradecido por un gobierno que nos va a subsidiar a todos y nos conduce, por fin, a la utopía socialista. El de Gracia y Justicia y la de Energías Sucias se ausentaron alegando conflicto de intereses al conocer al líder ultra y su familia".

Pero al final se impusieron las tesis del vicepresidente, o "vicepresidente segundo para la Revolución", según el consejo de pega de Marhuenda, sosteniendo "que no se puede hacer la 'spanish revolution', que eclipsará las revoluciones Francesa y Rusa, teniendo que soportar incómodos aristócratas rompiendo el merecido confinamiento. La sociedad tiene que ser adoctrinada convirtiendo a nobles y burgueses en buenos ciudadanos".