| 04 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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La empresa maldita: La otra cara de Divalterra

Nadie habla de los más de 550 brigadistas y del resto de las 150 trabajadores más que conforman Divalterra.

| Juan Carlos Galindo Edición Valencia

 

Jorge Rodríguez (PSPV-PSOE) y su socio de gobierno en la Diputación Valencia, Compromís, y posteriormente la vicepresidenta del Consell Mónica Oltra (Compromís) y el presidente Ximo Puig (PSPV-PSOE) han echado muy hábilmente la culpa a “la empresa” de lo sucedido. "La empresa” es la culpable de que unos golfos se lleven una pasta sin ir a trabajar, y los que van, ni se lo ganan.  ¿Entonces?

Divalterra es la firma dedicada al mantenimiento de nuestros montes, entre otras cosas, y a la extinción de incendios forestales en la provincia de Valencia. Es por ello que no puedo evitar pensar en Grecia, en sus más de 75 muertos y mas de 150 heridos por 7 incendios forestales, el dolor, la rabia, de esos brigadistas, esos héroes que se dejan la vida por salvarnos en muchos casos y en otros, en salvar a la naturaleza, que a veces solo pueden lamentar, pero que se dejan la piel y el alma en su intento por conseguirlo.

Esas personas también las tenemos aquí, en Valencia, ¿saben dónde? Trabajan en Divalterra, son brigadistas y no entienden de puestos de trabajo zombi, de prevaricaciones, de malversaciones, de duplicidad de contratos, de facturaciones falsas, de falsificaciones en documento privado y público ni de blanqueo de capitales. Ellos solo trabajan y se ganan el pan con el sudor de su frente, no se merecen que por culpa de algunos políticos corruptos, los otros políticos para lavar su imagen salpicada por la mierda, quieran cerrar la empresa y los trabajadores no puedan ni decir el nombre de donde trabajan por vergüenza.

Los políticos han transferido su responsabilidad hacia la sociedad mercantil, admitiendo la culpabilidad de la empresa, como si ésta estuviera gestionada por otros y no por ellos

Con qué habilidad los políticos de turno han transferido su responsabilidad política hacia la sociedad mercantil, admitiendo la culpabilidad de la empresa, como si ésta tuviera gestionada por otros y no por ellos; como si también tuviera vida propia, como si estuviera encantada o poseída por el mal y no hubiera estado tres años gestionada por el binomio PSPV-PSOE-Compromís. Nada han tenido que ver en esto, nada han tenido que ver en que DIivalterra haya tenido 4 gerentes dobles (uno por cada partido político, multiplicando por 3 sus costes) en 3 años, eso sí es gestionar bien los recursos humanos y tener claro el plan de negocio: los güisquis y los gin tonics.

Queridos brigadistas y trabajadores de Divalterra: no soy nadie, pero estoy con vosotros y quiero desde estas líneas rendiros un pequeño homenaje, ya que nuestros políticos no lo harán nunca, os seguirán utilizando a su beneficio. Es más, ¿pensáis que el actual gobierno en la diputación es de fiar? Alguien que no asume su responsabilidad política, lo que hará es lo fácil, ccerra Divalterra con el falso discurso oportunista, -ya no se puede hacer nada, lo mejor es cerrar- y vosotros ¿dónde están las garantías de continuidad? Donde están las reubicaciones laborales? ¡No se os oye! Haceros oír; sois clave, sois importantes, más que ellos, salir a la calle a reivindicar lo vuestro. Cuidado con los sindicatos que a veces son la voz de sus amos.

El nuevo presidente de la diputación de Valencia Toni Gaspar sigue sin recibir a los sindicatos representados en Divalterra, a que espera a recibirlos, o tiene miedo a decirles que cierra Divalterra, porque estos, los sindicatos, creen que no se van a atrever a cerrarla, con la vieja esperanza de que como vienen elecciones…

Qué ejemplo os da el que fue hasta hace poco vuestro jefe, regresando a la política después de decir públicamente que delegaba el cargo de alcalde de Ontinyent (porque de dimitir ni hablamos) para preparase la defensa de su investigación. ¡Que rápido tú! ¿Si no se ha levantado el secreto de actuaciones, qué narices se va a preparar? Nada: Más de lo mismo: mentiras, mentiras, engaños, que pena de políticos.

Os avanzo otra empresa que ha servido de paraguas de los amiguetes y compañeros de partido del señor Jorge Rodríguez, cesados entre enero y nuestras fechas en Divalterra: Egevasa. Iigual valen para una que para otra. Menos mal que los partidos que nos desgobiernan venían a regenerar la política. Menos mal.

Mientras tanto el conseller de Transparencia y Buen Gobierno,  Alcaraz, ni esta ni se le espera. ¡Ah si! ya recuerdo. Está presentando un software para predecir el delito junto con Hervé Falciani, ¡qué cachondo el tío!, ¡!qué despropósito ¡¡ y los suyos trincando….Ay Señor Señor ¡¡