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Castilla y León inicia la rebelión pacífica contra la felonía catalana

A través de un documento auspiciado por las Cortes y rubricado por 200 instituciones y colectivos, la sociedad castellano y leonesa se ha movilizado para abrir camino al resto de comunidades

| Alejandra Temprano España

Algo se mueve en el resto de España tras la propuesta de desconexión aprobada en el Parlament de Cataluña. Y Castilla y León ha sido la primera en dar un paso al frente.

La Comunidad gobernada por Juan Vicente Herrera ha abierto camino al pedir a Cataluña "mantener y hacer cumplir la legalidad democrática vigente" a través de un pronunciamiento social y político en favor de la unidad de España. Éste lleva por título Por el futuro de todos.

La iniciativa cuenta con el apoyo de PP, PSOE, Ciudadanos y Unión del Pueblo Leonés (UPL), pero no de Podemos ni de IU. Los firmantes arroparon al presidente de Castilla y León y a la de las Cortes, Silvia Clemente, en la presentación de esta declaración en la Cámara regional.

Frente a una copia de la Constitución y en presencia de los redactores del texto, Jesús Quijano y Fernando Rey, Clemente hizo un llamamiento a los valores de consenso, al diálogo y la sensatez y agradeció la participación de todos en este documento que habla "en positivo" de la democracia en Castilla y León.

Además de los grupos políticos, unas doscientas instituciones, personalidades y colectivos sociales vinculados con la Comunidad se unieron a la propuesta que hizo la propia Clemente la pasada semana, tras el éxito del quórum político. Un llamamiento que sigue abierto para que a través de la página web www.porelfuturodetodos.es se unan los ciudadanos.

Esta unidad política se dejó ver desde el momento de redactar el pronunciamiento, tal y como explicó a El Semanal Digital uno de los dos autores del texto, el jurista y actual consejero de Educación en Castilla y León, Fernando Rey.

"La conversación sobre una opinión conjunta surgió entre Jesús Quijano (PSOE) y el presidente Juan Vicente Herrera (PP). Son rivales políticos pero también comparten una gran visión estratégica. Más allá de los intereses partidistas afrontan los problemas con una visión generosa", explicó.

Rey se mostró satisfecho con esta sinergia política a la que se refirió como "más interesante que interesada" y recordó el papel de la "experiencia conjunta" en la redacción del Estatuto de Autonomía de Castilla y León, y posteriores reformas, en las que el también jurista, Jesús Quijano, trabajó codo con codo con los populares.

Un ejemplo de convivencia política que recomiendan a los catalanes convencidos de que las medidas que se deben aplicar en una autonomía son "fruto del consenso constitucional básico y del diálogo" como expresa el pronunciamiento.

Por el futuro de todos recoge la "firme posición de rechazo a la independencia territorial planteada fuera del marco de la Constitución" y afirma que no hay razón que avale los intentos secesionistas "más allá de la exacerbación política de un sentimiento identitario".

Con esta iniciativa, Castilla y León quiere terminar con el "diálogo estrecho" entre el Gobierno y fuerzas independentistas porque "más allá de ideologías, es un problema colectivo, que nos afecta a todos" afirmó Fernando Rey.

Podemos e Izquierda Unida se desligan

Los representantes de Podemos y de sus marcas blancas en Castilla y León rechazaron esta declaración conjunta, no solo en las Cortes regionales, sino en todas las administraciones en las que se votó la adhesión.

En el Ayuntamiento de Salamanca, la filial podemita, Ganemos se abstuvo en la votación que llevó a cabo el Consistorio. A pesar de ello, la unión del resto de fuerzas políticas permitió que se sumaran al pronunciamiento.

El líder de Podemos en Castilla y León, Pablo Fernández, explicó la negativa de su partido a avalar este documento porque ignora el "derecho a decidir" de los catalanes.

Para él, la única iniciativa válida sobre Cataluña es la aprobada por la Mesa de las Cortes en diciembre de 2014 de mano del expresidente de la Cámara, Carlos Sánchez Reyes de Palacio, que desde enero de este año milita en Podemos.

En la misma línea se sitúa el procurador de Izquierda Unida en las Cortes, José Sarrión, que confirmó su negativa a la declaración argumentando que ellos defienden la unidad de España "con el cerebro y no con las vísceras".

Los populares consideran sectaria esta postura y la sitúan en las antípodas de la mayor amplitud de miras que promueve el documento. "Estamos viviendo un momento político diferente al de hace un año pero respetamos todas las opiniones. La situación ha dado un giro cualitativo. Lo que está sucediendo es dramático", concluyó Fernando Rey.

Castilla y León no es la primera autonomía que intenta un pronunciamiento en contra de la secesión catalana y en favor de la unidad de España pero sí la primera que consigue sacarlo adelante.

Murcia o la Comunidad Valenciana lo propusieron antes con el impulso del Partido Popular y el apoyo de Ciudadanos pero las coaliciones de izquierdas presentes en ambos Parlamentos regionales lo frenaron.