UGT y CC.OO se inmolan con los golpistas: "¡puta España!", dice la manifestación

Miles de personas han llenado la plaza Espanya de Barcelona este domingo en la manifestación de partidos soberanistas y entidades para la liberación de los presos independentistas.

La concentración la organiza el Espai Democràcia i Convivència, una plataforma formada recientemente y compuesta por decenas de entidades políticas y sociales, de las que destacan cuatro: la ANC, Òmnium Cultural lo más polémico de todo, los sindicatos CC.OO y UGT de Catalunya, que se han unido al movimiento independentista causando estupefacción en toda España, bajas de afiliados y también una fuerte interna entre las distintas secciones catalanas tanto en UGT como en Comisiones Obreras.

El acto coincide con los seis meses de encarcelamiento del líder de JxCat en el Parlament, Jordi Sànchez, y del presidente de Òmnium, Jordi Cuixart.

También había miles de personas a lo largo de toda la avenida Paral·lel, que es por donde transcurría la manifestación, hasta la zona de las Tres Ximeneies. Mucha gente lleva banderas catalanas e independentistas y pancartas con la leyenda 'Basta de rehenes' o 'Puigdemont president'. El lema es 'Por los derechos y las libertades, por la democracia y la cohesión, ¡os queremos en casa!'. En la cabecera de la manifestación ha destacado la presencia del presidente del Parlament, Roger Torrent. 

Torrent, ha reiterado la necesidad de formar un frente unitario para responder ante la actuación del Estado contra el independentismo: "Cuando somos transversales, cuando somos plurales y nos unimos en la defensa de los derechos y la democracia, somos imparables". Ha asegurado que esta manifestación es una demostración de unidad ante la "regresión que amenaza los pilares fundamentales de la democracia que está haciendo el Estado español".

Pero para vergüenza, sobre todo de UGT y CC.OO, se han escuchado abundantes gritos e insultos contra España: "puta España", otras descalificaciones a las instituciones y a la Justicia lemas contra el PP y los partidos constitucionalistas (PSOE y Ciudadanos).

Explicación de UGT

El secretario general de UGT de Cataluña, Camil Ros, ha urgido a formar un Govern que haga frente a la agenda política y social, puesto que "no es el momento" para la unilateralidad ni el 155 ni juicios ni detenciones. "La mayoría de la sociedad catalana cree que la prisión preventiva no está justificada y, por tanto, pedimos que salgan en libertad Dolors (Bassa) y el resto de gente que está en la cárcel. La mayoría de la sociedad catalana también cree que no es momento de 155 ni de unilateralidad. No es momento de juicios ni de detenciones", ha dicho.

Ros ha defendido que las organizaciones sindicales de tiendan puentes y rechaza los bloques: "A lo que se debe dar mucho valor no es a que UGT y CC.OO. de Cataluña estén aquí, sino al comunicado de nuestras confederaciones a nivel estatal de UGT y CC.OO en estos momentos, las dos organizaciones sindicales están pidiendo diálogo, y yo creo que eso es lo que mucha gente no quiere".

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Otra de las dirigentes presentes es la coordinadora del PDeCAT, Marta Pascal, quien ha exigido la liberación de los presos soberanistas y el regreso sin represalias de los políticos catalanes en el extranjero: "Tenemos que luchar por la libertad colectiva e individual también. Hay gente privada de libertad".

Lo ha declarado antes de participar en la manifestación en Barcelona por los presos, donde también ha destacado la necesidad de que el independentismo forme ya un Govern para acabar con la aplicación "del artículo 155 miserable".

Los sindicatos se han unido a los "golpistas" que reclaman la liberación de los Jordis y la del resto de presos independentistas encarcelados: Oriol Junqueras, Joaquim Forn, Jordi Turull, Carme Forcadell, Dolors Bassa, Raúl Romeva y Josep Rull.

El ex presidente catalán Carles Puigdemont y los diputados de JxCat Jordi Sànchez y Jordi Turull, actualmente en prisión, habían animado, horas antes de la cita, a llenar las calles de Barcelona para pedir la libertad de los políticos soberanistas encarcelados.