El periodista que desmonta a Sanidad con tres crueles verdades sobre sus errores

La pandemia  de coronavirus ya le pasa factura al Gobierno, pese al consenso casi unánime que ha tenido hasta ahora desde todos los sectores políticos y mediáticos, con contadas excepciones. Pero la evidencia, cada vez mayor, de que se actuó tarde y no se tienen los recursos suficientes, empieza a resquebrajar ese apoyo.

Y un buen ejemplo es el artículo de Luis Ventoso, influyente columnista de ABC, que en un tono serio y casi quirúrgico desmembra al Gobierno con una lista de argumentos, preguntas y conclusiones demoledores a efectos de demostrar sus profundas lagunas en la crisis.

El Gobierno sabía desde el 30 de enero la letalidad del coronavirus y no hizo nada

Así arranca: "Un periodista alemán, donde sufren solo 55 muertos con 19.711 infectados, frente a los más de mil de España con 20.400, preguntó ayer al doctor Simón por los españoles con síntomas a los que no ven los médicos y la falta de test y respiradores. Su única respuesta fue: «No se puede generalizar». Sobre la diferencia de fallecimientos: «No lo puedo explicar»".

Y prosigue en el mismo tono gélido: "Los test son una herramienta clave contra la epidemia, como bien ha demostrado Corea del Sur. En España se están haciendo a cuentagotas, solo en casos serios y a gente con cargos. Preguntado el martes por ello, el doctor Simón anunció test masivos «en uno o dos días». Era falso. Ayer Illa respondió a una pregunta al respecto explicando que «estamos trabajando intensamente para adquirirlos»".

No saben explicar la diferencia de muertos con Italia y era falso que fueran a hacer ya test masivos

Para rematar: "Ha habido errores de juicio (permitir y alentar lo del 8-M). De previsión (Italia, país muy similar, ya estaba en cuarentena y en una batalla terrible y aquí seguíamos con la adulación a ERC y la ingeniería social). Errores de coordinación (como permitir que las comunidades cerrasen los colegios antes de establecerse el confinamiento general, lo que provocó una estampida de familias a lugares de recreo que expandió la epidemia). Y errores de previsión (pese al ejemplo de China en enero e Italia en febrero, nuestras autoridades no buscaron test, mascarillas y respiradores)".

Con una conclusión, que incluye al propio periodismo: "Tenemos que mejorar. Todos. También los periodistas que al principio, ignorando lo visto en China, comulgamos con el lugar común de que esto era como una gripe, incluso «menos mortal y contagiosa»".