El respaldo a Junqueras estimula a Puigdemont y pone a Sánchez en el acantilado

La resolución del Tribunal Superior de Justicia Europeo es toda una bomba. Pero más política que jurídica. Por mucho que haya reconocido el estatus de eurodiputado de Junqueras -y de cualquiera- nada más cerrarse las urnas, sin necesidad de cubrir los trámites administrativos, la inmunidad concedida al líder de ERC no varía la sentencia del Tribunal Supremo.

Parece enrevesado, y lo es, pero tiene explicación: la inmunidad atiende a una "pantalla anterior" a un fallo, ya firme, que condena al dirigente a 13 años de cárcel por sedición y le inhabilita para cargo público. El Tribunal Europeo no se mete en eso; simplemente dice que Junqueras podía haber sido designado eurodiputado y lograr con ello una inmunidad que ahora es ya imposible, explican a este periódico fuentes jurídicas.

El Tribunal Europeo socorre a Junqueras a costa de España

ERC ya ha pedido la liberación, y en ese sentido hasta sería un balón de oxígeno para el PSOE, que no necesitaría buscar atajos ni conceder indultos para ver a su potencial socio fuera de prisión, con una medida arbitraria de Sánchez con un alto coste político.

Pero hay un problema político. Y muy gordo. Tanto como para poner en cuarentena la investidura de Sánchez el 30 de diciembre o el 5 de enero, las dos fechas que baraja ahora mismo Ferraz. Se llama Puigdemont, el tapado en todo esto. El fallo en favor de Junqueras es individual, pero sienta un precedente del que puede aprovecharse el expresidente catalán fugado.

¿Será él eurodiputado antes de ser juzgado y por tanto sí logrará la inmunidad? La posibilidad existe, y de cumplirse a medio plazo, podría provocar una situación peculiar: Puigdemont libre, al menos mientras el Supremo encuentra el camino para juzgarle con el suplicatorio al Parlamento Europeo, y Junqueras entre rejas.

Si Puigdemont queda suelto, a ERC no le vendrá nada bien pactar con Sánchez y dejarle a él la patente independentista

Una imagen difícil de ver sí, pero no imposible y con consecuencias políticas inmediatas para el PSOE, resumidas en una pregunta que fuentes políticas reconocen a ESdiario que ya está sobre la mesa. ¿Se atreverá ahora ERC a facilitar la investidura de Sánchez sabiendo que Puigdemont puede quedar "suelto" y volver a Cataluña como estandarte del independentismo frente a un Junqueras aliado con los socialistas?

Un laberinto

No se pueden hacer cábalas al respecto. El laberinto es inmenso. Pero la lucha fraticida entre Puigdemont y Junqueras, con el horizonte de las Elecciones Catalanas en 2020, lo condiciona todo: de ahí el empeño de ERC en meter a Quim Torra y a la Generalitat en la negociación con el PSOE. Los republicanos tienen miedo de que les vuelvan a llamar "autonomistas".

Era un temor controlado hasta esta decisión de Luxemburgo, que puede cambiarlo todo. No para Junqueras ni para Puigdemont al corto plazo al menos. Pero sí para Sánchez. Y desde hoy mismo.