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Un grupo de trabajadores amarga la "condena" a Rajoy en Pontevedra
Los votos de BNG, PSdG y Marea consiguieron declarar al presidente "persona non grata" en su ciudad. Pero numerosas personas quisieron expresar su enfado por una medida polémica.
La moción para declarar persona non grata a Mariano Rajoy en Pontevedra ha sido movida. Tras casi tres horas de pleno, el presidente del Gobierno ha recibido dicha calificación en su ciudad aunque no de la forma en que esperaban sus promotores.
La celebración del pleno en el Teatro Principal de Pontevedra ha contado con la presencia de numerosos simpatizantes del Partido Popular capitaneados por la diputada y expresidenta del Parlamento gallego Pilar Rojo.
Asistentes al #Pleno municipal de #Pontevedra muestran su apoyo a @marianorajoy pic.twitter.com/RhSAZsQ5pF
— PP Pontevedra Local (@PP_Pontevedra) febrero 22, 2016
Pero no han sido los únicos que han acudido a protestar, porque han estado secundados por trabajadores de la celolusa Ence, afectada por la cuestión.
La iniciativa puesta en marcha por BNG, PSdG y Marea para declarar persona non grata a Rajoy en su ciudad natal tiene que ver con la prórroga concedida por el Gobierno para que Ence siga en la ría de la ciudad.
Protestas populares
Cientos de personas se agolpaban ante el teatro desde primera hora de la mañana con carteles con lemas como "Rajoy persona muy grata", "Pontevedra es tolerante" o "Pontevedra nunca ofende", entre otros.
La sorpresa es que los partidarios de Rajoy y los trabajadores de Ence y otras empresas vinculadas a ésta han tenido mayor protagonismo que los ecologistas que habían acudido a secundar la moción, cuyo pleno comenzó a las once de la mañana.
De hecho, la tensión ha sido tal que en un momento dado el alcalde Miguel Anxo Fernández ha tenido que suspender el pleno ante los abucheos recibidos por el portavoz socialista, Agustín Fernández, cuando ha procedido a leer la moción. Otro tanto ha sucedido cuando ha hecho lo propio el portavoz de Marea Luis Rei, que ya dejó patente su odio a Rajoy en días pasados.
Los concejales populares optaron por abandonar su lugar en el pleno y ocupar espacio entre los asistentes. Por su parte, los de Ciudadanos votaron en contra de la moción al considerar que no aporta soluciones.
La moción salió adelante gracias a los votos conjuntos de BNG, PSdG y Marea.
