Una independentista se cuela en un acto de Sánchez en EEUU y se encara con él

Dentro de su gira por Canadá y Estados Unidos, Pedro Sánchez mantuvo este martes un encuentro en inglés con los miembros del Council on Foreign Relations. 

Allí afirmó que no piensa convocar elecciones antes de 2020 sino que su intención es agotar la legislatura, unas declaraciones que han sido ampliamente recogidas en España.

Pero lo que no ha trascendido es que una independentista consiguió hacerse con el micrófono e intentó poner al presidente socialista en un brete, reprochándole que hable de diálogo ante un auditorio lleno de periodistas y profesionales norteamericanos. 

Ocurrió en los compases finales del encuentro. El moderador dio paso a una última pregunta y tomó la palabra una mujer que únicamente se identificó como Mar (no dijo si era socia del Council on Foreign Relations o periodista) y que tampoco llevaba pegatina distintiva en su solapa como el resto de los presentes.

Ésta cogió su teléfono y leyó de corrido una pregunta que llevaba escrita en inglés: "¿Cómo puede empezar el diálogo con Cataluña cuando los representantes que resultaron electos en las elecciones de diciembre están en prisión?", empezó.

Acto seguido aludió a la persecución de la Justicia española a los seis -con Carles Puigdemont al frente- que "han elegido exiliarse en países como Bélgica, Suiza y Alemania", cuyos tribunales han rechazado extraditarlos por delitos de rebelión y sedición.

La tal Mar concluyó, ante las caras de sorpresa del resto: "Agradezco mucho que hable de diálogo pero cómo puede ese diálogo empezar cuando los miembros electos están en la cárcel". 

El moderador dio la palabra al presidente, que suspiró, movió la cabeza en señal de desaprobación y  y se lanzó a responder a la perorata independentista.

Sánchez dejó claro a los presentes que en las Cortes españolas hay partidos que defienden las ideas independentistas, pero que los actos políticos tienen consecuencias judiciales. Y explicó al auditorio que esos cargos electos a los que se refería la interviniente no solo desoyeron sistemáticamente las advertencias del Tribunal Constitucional, sino también de los propios servicios jurídicos del Parlament.

"Me gustaría subrayar que en nuestro país seguimos la regla de la ley y nuestro poder judicial es autónomo, independiente". "Ley y diálogo", remachó.