El PP recluta a valencianos para Cataluña

A nueve días de las elecciones más decisivas para el futuro de Cataluña y de España, el Partido Popular ha movilizado a sus principales cargos en la Comunidad Valenciana para suplir su débil estructura orgánica en provincias como Lleida o Girona. La directriz de Génova "obliga" a los diputados y senadores a ejercer de apoderados en las mesas electorales catalanas. Un paso más allá ya que hasta ahora la movilización en pasados comicios se limitaba a las bases y a los cargos locales del partido.

Los once senadores y los trece diputados en el Congreso han sido "llamados a filas" y tiene comprometido el jueves 21 en Cataluña. La mayoría de ellos conocen ya el colegio electoral de destino y son conscientes del ambiente presumiblemente hostil en el que tendrá que realizar su papel de control.

Una movilización "popular" justificada ante unos comicios trascendentales para el futuro de Cataluña y de resto del Estado. En el PP existe el temor de que unos malos resultados pueda debilitar al gobierno de Rajoy. Los parlamentarios valencianos están convocados hoy a un encuentro con el resto de sus compañeros donde recibirán instrucciones sobre el 21-D. Con posterioridad mantendrán un almuerzo de trabajo en el Senado a la que también asistirá la presidenta y la secretaria regional, Isabel Bonig y Eva Ortiz.

La dirección nacional ha reclamado también a sus militantes de toda España que se impliquen en una campaña electoral que es sin duda la más atípica de la historia.  Los comicios convocados por el presidente Mariano Rajoy tras la aplicación del artículo 155 de la Constitución, con el ex presidente y candidato Carles Puigdemont huido de la justicia en Bruselas, y el ex vicepresidente Oriol Junqueras en prisión, se antojan una auténtica prueba de fuego para los populares que confían en salvar los muebles con un resultado similar al obtenido hace dos años.

El PP se ha marcado como objetivo contar con apoderados e interventores en al menos el 85% del censo, merced al apoyo de militantes y simpatizantes de diferentes comunidades, en especial de les Illes Balears y, sobre todo, de la Comunidad Valenciana. Lo que resulta una novedad es la implicación activa de diputados y senadores. La parlamentarios nacionales por Castellón tendrán como zona de acción Tarragona. En cambio, los de Valencia y Alicante serán destinados como apoderados en Barcelona y el área metropolitana.  A Lleida y Girona, cuna del independentismo, se desplazarán para la ocasión otros voluntarios, en su mayoría cargos públicos locales y militantes de base.

Los efectos del resultado del jueves 21-D, en opinión de un alto cargo del PP , van a ser palpables en la política nacional y autonómica. Varias hipótesis están encima de la mesa incluidas cambios en la convocatorias electorales.