Risto diseña para el nuevo Canal 9 un logo independentista y al PSOE le encanta

Con nocturnidad, por sorpresa y con polémica incluida. El Gobierno valenciano de Ximo Puig y Mónica Oltra, a través del Consejo Rector de la Corporación Valenciana de Medios de Comunicación (CVMC), ha propuesto el nombre de la nueva televisión autonómica que va a sustituir al desaparecido Canal Nou. Se llamará À. y se pronunciará À punt (A punto).

Se da la circunstancia de que este logotipo ha sido utilizado habitualmente por el independentismo catalán, lo que ha provocado una enorme polvareda política en las últimas horas. Además, la nueva responsable del Ente es la exdelegada de TV3 en la Comunidad Valenciana, Empar Marco, conocida por su activismo militante en el soberanismo catalán.

La decisión fue adoptada en la noche de este miércoles y ha sido confirmada este jueves por la Generalitat mediante un comunicado. La nueva marca se ha elegido "después de analizar todas las propuestas presentadas" y ha sido diseñada por la agencia Afthershare, de la que es propietario el televisivo Risto Mejide. 

Según el Gobierno que integran PSOE y Compromís, se ha valorado que la letra A "es la primera letra del abecedario" y que "significa el inicio, comenzar desde cero e inaugurar una cosa nueva".

El PP pide que se anule la decisión

Tras conocer la polémica elección, el PP ha anunciado que va a pedir al Consejo Rector que "reconsidere" la decisión de elegir la denominación À.-À punt y que "se vuelva atrás" porque esta "no puede tener como nombre el eslogan del independentismo catalán".

Así lo ha asegurado el diputado Jorge Bellver, que ha señalado que ha hablado con parte del resto de grupos parlamentarios y "no hay nadie contento" con ese nombre.

Así, y pese a "dar por buena" esa "casualidad sorprendente" de la denominación con el citado eslogan, ha indicado que no quieren que "esa casualidad sorprendente se convierta en casualidad sospechosa".

Por ello, ha explicado que esa petición va a ser trasladada al Consejo Rector por medio de su representante en este órgano. Pese a que Bellver ha admitido que "se hizo una valoración de buena fe" de las denominaciones presentadas al concurso, ha indicado que ha surgido la polémica porque À punt fue el eslogan del independentismo republicano catalán.