Las ciudades necesitan más bicicletas eléctricas, y Kymco lo sabe

Hoy en día ya circulan por el planeta más de 200 millones de bicicletas eléctricas, aquellas que disponen de una batería y un motor eléctrico de hasta 250W que asiste la pedalada con un objetivo claro, fomentar la movilidad sostenible y un estilo de vida saludable. En nuestro país 1 de cada 4 ciclistas habituales ha usado alguna vez un modelo eléctrico, y siempre con una gran satisfacción de uso y una clara intención de compra una vez comprobadas sus virtudes, pues no solo permiten ir a trabajar de manera desahogada y saludable, sino que fomentan el ciclismo intergeneracional, ya que permiten seguir pedaleando a buen ritmo a edades más avanzadas. 

Hace ahora un año, llegaron a nuestro mercado en primicia mundial las primeras bicicletas eléctricas de Kymco, el fabricante de scooters, que tras más de 50 años movilizando a medio mundo con sus motos comprendió que la sociedad demandaba un nuevo enfoque del transporte urbano. La marca taiwanesa ha apostado fuerte por este producto, pero de momento el mercado no termina de despegar. En España, en 2017, que es el último año con datos completos disponibles, se vendieron unas 72.000 bicicletas de este tipo, lo que supuso un 80% más que un año antes pero sólo un 6,5% del mercado total.

Kymco España tiene una Dirección General de e-Movilidad, donde se aglutinan todas las propuestas y desarrollos de movilidad urbana de la marca más sostenibles y eficientes, un departamento dirigido por Fernando Saiz y que poco a poco está acercando al gran público sus bicicletas urbanas de gama alta, que cuentan con una gran calidad, son de fabricación propia y unos diseños con firma que corrieron a cargo de Adriana Monk, diseñadora de yates de lujo y coches Premium como Rolls Royce y Jaguar. 

Dirigidas a usuarios con necesidades diarias de movilidad urbana que buscan una solución eficiente, elegante y sana, la gama de e-Bikes de Kymco se compone de dos modelos, el Q más pequeño y plegable (con una variante monomarcha Lite) y el B, con ruedas de diámetro más grande y enfocado a desplazamientos más largos o rutas más lúdicas. Ambos comparten sus componentes de fabricación y tecnología Kymco: el cuadro de aluminio, el motor en el buje trasero y la batería extraíble de 360Wh.

El sistema de tracción trasera Biactron, un desarrollo propio que se caracteriza por su simpleza ya que es directo, resulta silencioso, robusto y fiable, y permite cuatro niveles de ayuda, siempre con la asistencia disponible hasta 25 km/h, que es el máximo que la reglamentación europea permite para este tipo de vehículos. La autonomía es de hasta 90Km dependiendo del uso, de lo mejor del sector, e incorpora un sistema antirrobo en el display. 

La bici eléctrica es un invento que tiene más de 100 años, ya que el estadounidense Ogden Bolton Jr. patentó la primera en 1895, pero sin duda sigue siendo un objeto plenamente moderno que cada día va a contar con más adeptos gracias a productos como las e-bikes de Kymco, cuyo precio que parte de los 2.000 euros con un seguro de robo y a terceros durante un año incluido.