| 21 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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Errejón intenta borrar sus huellas, pero ya es demasiado tarde...
Errejón intenta borrar sus huellas, pero ya es demasiado tarde...

El "pásalo" que circula contra Errejón y el truco bajo cuerda de Colau

Mira que ha intentado borrar las huellas del "delito", pero el número dos de Podemos ha dejado "rastro" y ahora le están poniendo la cara colorada. La alcaldesa de Barcelona tiene su plan

| Isabel de Dios Medios

Resaca del bronco cara a cara entre Mariano Rajoy y Pedro Sánchez y no se habla de otra cosa en los digitales que de quién ganó o perdió el debate. El último del bipartidismo, según auguran los emergentes. Para José Antonio Zarzalejos en El Confidencial está claro que no ganó ninguno y habla de "abochornante debate de perdedores. No dieron la talla los representantes del bipartidismo, ni en el fondo, ni en la forma, estableciendo en el debate público -no parlamentario- un hito que será difícil olvidar: los insultos cruzados. Si la confrontación entre Sánchez y Rajoy fue la “última del bipartidismo” resultó un último acto político de más mediocre y fea factura". 

Ok Diario tiene claro quién ganó: "Rajoy tumba a un Sánchez que sólo despuntó con la corrupción. Pedro Sánchez salió tocado y tal vez hundido del debate con Mariano Rajoy. El candidato del Partido Popular lo tumbó con un aluvión de datos económicos y una profundidad en el conocimiento de las materias que desarboló a un Pedro Sánchez mucho más trivial". 

En esta línea, Ana I. Martín señala en ESdiario que "Sánchez desata contra Rajoy la rabia contenida tras el consejo de sus asesores en el descanso. Alguien tenía que pagar los platos rotos de su frustración por lo mal que le están yendo las cosas al socialista en esta campaña, y ese alguien fue el presidente, descolocado ante tanta agresividad". 

Claro que El Español disiente y apunta que "el líder del PSOE logra desquiciar al presidente del Gobierno durante el duelo a dos con menciones a su extesorero Bárcenas y al tacharle de "indecente". La respuesta del candidato popular a la reelección, también dura". 

Por su parte, Antonio Casado piensa en El Confidencial que "Sánchez se comió a Rajoy en un debate de verdad. La cosa fue de menos a más. Lo mejor vino después, cuando Sánchez puso de los nervios al presidente del Gobierno por cuenta de la corrupción. Este acabó perdiendo la calma y el debate  La ofensiva del candidato socialista resultó de lo más eficaz para sus intereses, hasta el punto de sacar de quicio a su adversario, al que acusó de no ser creíble".

Votar en función de la mayor o menor brillantez expositiva de un candidato es hacerse trampa a uno mismo

Para Fernando Jáuregui en Diario Crítico, "en todo caso votar en función de la mayor o menor brillantez expositiva de un candidato es hacerse trampa a uno mismo; no siempre el más locuaz, o el más agresivo, o el que parece poseer mayor cantidad de datos, es el mejor gobernante. El debate es apenas una prueba más, un examen al que se somete a quien quiere representar a los telespectadores, pero ni siquiera es el examen decisivo. Hay controles mucho más importantes". 

Debates aparte, José Alejandro Vara señala en VozPópuli que "el PP confía en subir más de tres puntos con el acelerón final. Génova confía en que el acelerón final de la campaña le otorgue dos o tres puntos en el resultado final. El PP se aferra a que el partido en el Gobierno resulta siempre favorecido a la hora de la verdad, por encima de lo que señalan las encuestas. El alto número de indecisos aseguran que favorece esta teoría". 

Según Infolibre, "el PP da un giro sobre incompatibilidades en plena campaña electoral.  La proximidad del 20-D ha provocado que los conservadores cambien su forma de afrontar las compatibilidades de sus cargos públicos. Los casos de Vicente Martínez-Pujalte o Agustín Conde no merecieron reproche de la dirección del PP, todo lo contrario de lo que está ocurriendo con Pedro Gómez de la Serna. "No nos podemos permitir ningún patinazo", admite un dirigente nacional". 

Mientras tanto, en el PSOE aprovechan para saldar viejas cuentas pendientes. Cuenta Antonio R. Naranjo en ESdiario que "el PSM de Madrid se venga de Leguina con una jugarreta infantil. El episodio, que ha pasado casi desapercibido, refleja cómo está el percal en el socialismo madrileño, donde la mitad vela armas contra la otra mitad de cara al 21 de diciembre. Leguina acaba de recibir una puñalada por la espalda y sin aviso de, nada menos, el pulcro Ángel Gabilondo, a cuento de un nombramiento aparentemente menor pero de gran enjundia. Al grupo parlamentario socialista en la Asamblea regional le correspondía elegir a uno de los suyos para ocupar un sillón en el Consejo Social de la Universidad de Alcalá, históricamente volcada en echar una mano al PSOE con rectores como, especialmente, el hoy caído en desgraciaVirgilio Zapatero a cuento de las ínclitas black cards. Cuando todo el mundo esperaba que Gabilondo se limitara a renovar a Leguina, que además preside el órgano, el líder del PSOEajustició sin aviso a su compañero para poner a otro más del agrado de la dirección regional de su partido: el exdelegado del Gobierno y ex alcalde complutense, Arsenio Lope Huerta". 

La PAH organizó un escrache en las sedes de Ciudadanos, PP y PSC pero se olvidó de hacerlo en la de Barcelona en Comú

La alcaldesa de Barcelona también sigue concentrada en colocar a sus afines, según publica Libertad Digital: "Ada Colau incorporó en su equipo a la hasta ahora dirigente de la PAH, Susana Ordoñez. Parece ser que el fichaje de Ordoñez ha sido más que suficiente para que Colau vuelva a contar con el beneplácito de la PAH. Este lunes, la plataforma organizó un escrache simbólico en las sedes de Ciudadanos, PP y PSC en Barcelona, pero se olvidó de hacerlo en la de Barcelona en Comú, que es el partido que gobierna y al que han criticado por su actitud ante los desahucios. La peor parte se la llevó la sede de Ciudadanos, donde decenas de miembros de la PAH llenaron los cristales con pegatinas de su organización para ocultar los carteles electorales". 

Segundo Sanz añade en VozPópuli que "un colaborador de Ada Colau en la PAH orquesta los escraches a PP, PSOE y C's Ernest Marco fue uno de los seis fundadores de esta plataforma, junto a la alcaldesa de Barcelona y su marido, Adrià Alemany. Este grupo de activistas anuncia que también se manifestará el sábado durante la jornada de reflexión del 20-D".

Mientras los colegas de Colau escrachean a los rivales políticos, el número dos de Podemos, Íñigo Errejón anda ocupado estos días borrando viejos tuits contra la polícia. Sin embargo, según El Chivato de El Confidencial Digital: "La reacción no se ha hecho esperar y en foros de miembros de la Policía Nacional está circulando una carta abierta de un agente en la que responde a Errejón. “Te voy a tutear. No me mereces absolutamente ningún respeto y no te lo voy a guardar”, comienza esta carta, que va acompañada de pantallazos de otros tuits ofensivos del número dos de Podemos, como varios en los que utiliza el lema “nazi de día, de noche policía”. La misiva sube de tono cuando el autor le recomienda a Errejón que se “lave la boca antes de hablar” de la Policía, a la que considera que ha faltado el respeto. “¿De verdad no te da ni un poco de vergüenza? Hombre por favor, que aspiras a ser vicepresidente del gobierno de España, esa España que odias”. Además, añade que es “sencillamente asqueroso” que un mensaje así lo pusiera quien ahora es número dos de un partido político: “La gente como tú, con este nivel de cinismo, me da mucho miedo, más que cualquier desequilibrado con los que me enfrento día a día”. La carta, que está circulando entre policías y firma un agente con las siglas “PS”, termina avisando que “seguramente si algún día te ves en un apuro grave, (Dios no lo quiera) grave de los de verdad, de los que tu vida o la de algún ser querido tuyo corra peligro, de los que dan miedo de verdad, ese día si vas a querer que cumpla mi trabajo”. Pero remacha a continuación que “ese día no seré tan bastardo y te ayudaré. La Policía está para eso, porque nosotros sí somos profesionales y hacemos nuestro trabajo, nos guste o no”.