Rajoy hace sangre en los puntos flacos de Iglesias, Mas y Rivera

Pedro Piqueras volvió a hacer una entrevista de garra de acero en guante de seda. El jefe de Informativos de Telecinco sentó en el plató a Mariano Rajoy, que comenzó anunciando el interés de Barack Obama por visitar España "el año que viene". Piqueras aprovechó para recordar la presencia del presidente del Gobierno en la Cumbre del Cambio Climático en París y lanzarle la primera pregunta: "¿Está más preocupado por el cambio climático que en 2007?"

"Fue una equivocación", admitió Rajoy sobre aquellas palabras en las que restó importancia a dicho cambio citando como oráculo a su primo científico.

Los temas de actualidad eran obligados. El primero, la cuestión terrorista. El jefe del Ejecutivo desgranó los lugares de África y Asia donde tropas españolas combaten contra el terrorismo y colgó una medalla a España: "Es el país que está más avanzado, junto con Francia, en la lucha contra el Daesh". También negó que se esté retrasando un hipotético incremento de efectivos contra el Estado Islámico. "En absoluto. La lucha contra el terrorismo es algo capital", aseguró.

"Cuando haya un planteamiento de los franceses hablaré con los grupos parlamentarios", afirmó

"Cuando haya un planteamiento de los franceses hablaré con los grupos parlamentarios", afirmó de nuevo para remarcarlo. Rajoy también se mostró partidario de "acabar con el Daesh y luego... pues cada uno tiene sus historias", en alusión a que los prioritario liquidar al ISIS. "Nadie está a salvo de nada. Pero pueden estar ustedes tranquilos", apuntó sobre la labor de los servicios de inteligencia respecto al yihadismo.

El presidente se mostró muy contundente con los asuntos locales, especialmente con Artur Mas. "Ojalá que no", respondió a la pregunta de Piqueras sobre una posible aplicación del artículo 155 que suspendería la autonomía catalana. Pero también dejó claro que, si toca, lo hará. "Me gustaría que se volviera a la normalidad", pidió Rajoy, que describió con crudeza cómo el bono catalán estaba catalogado como "basura" y la Generalitat no encontraba quien le prestase.

Pero Mas no fue el único blanco de Rajoy, que puso en la picota a Ciudadanos porque "no nos dio nada si el PSOE quedó en primer lugar", abogando por que el cabeza de lista más votado sea el que gobierne.

Rajoy zanjó de un plumazo la cuestión de los debates a tres o a cuatro aludiendo a que "lo que se ha hecho siempre es debatir entre el jefe del Gobierno y el líder del partido de la oposición", resaltando la complejidad de unos debates en los que, si se tiene en cuenta la representación parlamentaria, también habría que contar con IU y UPyD.

Dardo envenenado muy a la gallega, especialmente para los emergentes, comparando su agenda presidencial con la de sus líderes: "Yo comprendo que estas personas tengan todo el día para hacer debates"

Dardo envenenado muy a la gallega, especialmente para los emergentes, comparando su agenda presidencial con la de sus líderes: "Yo comprendo que estas personas tengan todo el día para hacer debates".

 Rajoy reconoció haberse equivocado ("no se acierta siempre") apoyando a ciertas personas como Luis Bárcenas, desgranó el paquete de medidas económicas y fiscales que prepara si gana las elecciones y describió la legislatura como "muy difícil".

Su principal medalla para una victoria del PP también fue envenenada para sus contrincantes: "Por experiencia". "A los sitios se llega aprendido", advirtió.

Y al final Piqueras le arrancó una sonrisa al preguntarle si su hijo Juanito le apoyaba mientras le pasaba el video de su visita a la COPE y la célebre colleja. "Juanito está a favor de su padre", se relajó para poner el punto final a la entrevista.