Benidorm: Gobierno y oposición exigen al Consell el pago a los colegios

El pleno de Benidorm ha aprobado por unanimidad una propuesta de apoyo a los colegios públicos de la localidad para reclamar a la Generalitat que abone los pagos pendientes correspondientes a becas de comedor y funcionamiento general.

La propuesta llega después de conocerse que el retraso en los pagos provocó hace algunos días, tal  como publicó ESDiarioCV, que los alumnos del colegio Gabriel Miró estuvieron a punto de quedarse sin servicio de comedor porque la empresa no había pagado a las cocineras al no haber
recibido el dinero y las trabajadoras se negaban a prestar el servicio si no cobraban.

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El retraso en los pagos, no obstante, afecta a todos los colegios de Benidorm,  ha puesto de manifiesto en el pleno la concejal de Educación, Maite Moreno, quien ha cifrado los atrasos en más de 350.000 euros solo en Benidorm y en unos 15 millones de euros en toda la Comunidad Valenciana.
La propuesta ha sido apoyada por los grupos de la oposición, PSOE y Ciudadanos, aunque el portavoz socialista Rubén Martínez ha hecho algunos matices. Entre ellos, ha recordado que en 2014, con gobierno del PP en la administración autonómica, “el dinero para becas era un 40%
inferior al actual” y que aquel año los retrasos en los pagos a los centros escolares “alcanzaban los once meses”.

Por otra parte, en la misma sesión también ha salido adelante una moción del gobierno local, similar a la que se ha presentado en otros ayuntamientos, para instar al Gobierno de España a adoptar medidas y actuaciones en materia de recursos hídricos. Una petición fundamentada
tras la negativa a un nuevo trasvase del Tajo Segura. Ahí, la portavoz del gobierno, Lourdes Caselles, ha justificado la petición en que los cultivos de regadío “dependen en buena parte de ese trasvase”, que suministra a Alicante, Murcia y Almería y una población total de 2,5 millones de personas. A juicio de la edil popular, la no autorización del trasvase “pone en riesgo la economía del Levante español”. Caselles también rechazó la vinculación realizada por el Ministerio con la situación de emergencia en el mar Menor para justificar la negativa al trasvase. “No tiene nada que ver lo uno con lo otro” señaló.

Les importa un pepino lo que digan los políticos

Mientras, el socialista Rubén Martínez insistió en que la decisión de autorizar o no el trasvase es una cuestión técnica y no política. “A los técnicos les importa un pepino lo que les puedan decir los políticos del PP o PSOE sobre el trasvase”. Por su lado, el portavoz de Ciudadanos, Juan
Balastegui lamentó que en la moción no se hubiera incluido la petición de “más y mejores infraestructuras” para evitar que en períodos de fuertes lluvias los pantanos de la comarca “tengan que verter agua al mar y perder un recurso hídrico tan importante por no tener más capacidad de almacenamiento”.

Por otro lado, en la sesión también se aprobó con los votos a favor del PP y la abstención de la oposición la modificación del contrato de conservación y mantenimiento de los parques y jardines públicos de la ciudad, tras la inclusión de nuevas zonas verdes en el contrato como el Parque de la Séquia Mare y el jardín junto al apeadero del TRAM en la estación de Autobuses.

La oposición alertó de que casi se ha alcanzado el máximo de superficie que prevé el contrato, por lo que cuando se incorpore alguna zona verde más “habría que ir a una nueva licitación”. A ello ha respondido el concejal de Obras, José Ramón González de Zárate, señalando que en ese caso hay
varias fórmulas, entre ellas la realización de “un nuevo contrato que abarque solo a la nueva zona verde”. Por último el pleno también acordó la adhesión de Benidorm a la Red
Española de Ciudades por el Clima.