| 25 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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El matrimonio, "pillado" en un pueblo de Ciudad Real.
El matrimonio, "pillado" en un pueblo de Ciudad Real.

Las vacaciones a todo lujo de Cristina y Urdangarin, otro lío para el Rey Felipe

Era inevitable que se filtraran las fotos como inevitable que se produjera un incendio en Twitter que daña a la Casa Real. Ambos descansan en una lujosa finca en un pequeño pueblo manchego.

| D.L. España

La infanta Cristina, su esposo Iñaki Urdangarín y sus hijos se encuentran pasando unos días de descanso en la finca ´La Toledana´, propiedad que la familia Borbón-Dos Sicilias tiene en el término municipal de Retuerta del Bullaque (Ciudad Real). La infanta Cristina e Iñaki Urdangarín, junto con otros familiares, acudieron a la iglesia parroquial de San Sebastián de Porzuna, municipio situado a escasos kilómetros de La Toledana, para participar en la función religiosa de los Santos Oficios.

Allí fueron vistos por los vecinos que se encontraban en la iglesia para seguir la función religiosa y que se sorprendieron al verlos entrar en la iglesia, acompañados por miembros de la familia Borbón-Dos Sicilias. Una vez concluidos los oficios, la noticia corrió de boca a boca por todo el municipio e, incluso, en las redes sociales se han publicado algunas imágenes de ambos.

A los vecinos del lugar, tal y como ha podido comprobar ESdiario, les ha gustado la presencia "monárquica" tanto es así que muchos de ellos se han fotografiado gustosamente con el matrimonio, tal y como les mostramos en la imagen inferior. 


Algunos vecinos del pequeño pueblo se fotografiaron con el matrimonio.

Sin embargo, la cosa ha sido distinta en las redes sociales. Fundamentalmente Twitter ha ardido con las vacaciones de Semana Santa del matrimonio. Sobre todo desde sectores de Podemos. Como este primer comentario que les reproducimos en ESdiario y que hace alusión a la cárcel, aunque se trate de una irónica duda.

Otro tuit con petición de cárcel para el ex Duque de Palma.

Pronto Twitter fue en hervidero en contra del matrimonio, pero también en contra de la Casa Real y de Felipe VI y Doña Letizia, comentarios algunos que no son muy correctos reproducir, algo que vuelve a poner en tela de juicio el papel de la Monarquía y de nuestra Casa Real, precisamente en unos días en los que se ha celebrado el aniversario de la II República. En este sentido, les dejamos este del ideólogo de Podemos, Juan Carlos Monedero.

Muchos comentarios negativos para esta "escapada" relajante de Cristina e Iñaki

O este otro comentario negativo para cerrar el asunto de las críticas y haciendo alusión a unas posibles "vacaciones pagadas" con el dinero de todos los españoles.

Se como fuere, tal y como recoge El Digital Castilla-La Macha, la hermana del rey Felipe y su marido han optado por pasar estos días en esta finca de unas 2.000 hectáreas de terreno, que era propiedad de Carlos de Borbón-Dos Sicilias y Borbón-Parma, duque de Calabria e Infante de España por designación del Rey Juan Carlos I, que falleció en octubre de 2015 en esta finca.

La infanta ha acudido invitada por la prima del rey Juan Carlos Ana de Orleans y su primo Pedro de Borbón-Dos Sicilias, primogénito del infante Carlos, y, desde la muerte de su padre, nuevo duque de Calabria.

Según las mismas fuentes, la familia habría buscado la tranquilidad de esta finca ubicada en la provincia de Ciudad Real, para pasar unos días de descanso alejados de cualquier foco mediático, teniendo en cuenta la reciente sentencia del caso Nóos, que absolvió a la infanta Cristina, pero condenó a su marido a seis años y tres meses de prisión, que de momento ha eludido a raíz de las medidas provisionales dictadas por la Audiencia de Palma.

La Audiencia de Palma decidió no atender la petición de la Fiscalía y acordó dejar libre a Iñaki Urdangarín, sin necesidad de que abone una fianza de 200.000 euros. El tribunal le obliga a comparecer el día uno de cada mes ante la autoridad judicial de su país de residencia, Suiza, y a comunicar sus posibles cambios de residencia. Tras la sentencia del caso Nóos, la familia sigue con normalidad su vida en Ginebra (Suiza).