| 25 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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El MARQ completa la exposición ‘Gladiadores’ con el anfiteatro de Pompeya

La diputada de Cultura destaca la importancia de la obra y el interés despertado por la muestra, con más de 11.000 visitantes registrados en solo tres semanas

El MARQ ha recibido la pieza original ‘Lucha entre pompeyanos y nucerinos en el anfiteatro de Pompeya’, un fresco del siglo I d.C. que, desde este mediodía, forma parte de la exposición ‘Gladiadores. Héroes del Coliseo romano’. Su instalación se ha llevado a cabo a la vista del público para no interrumpir la exposición y mostrar el proceso. Esta incorporación, que reemplaza una réplica exacta cedida por el Museo Arqueológico de Nápoles, completa la muestra internacional que permanecerá hasta el 16 de octubre en el museo alicantino.

La vicepresidenta y diputada de Cultura, Julia Parra, ha visitado el MARQ para hacer un seguimiento de la instalación de este fresco, propiedad también del Museo de Nápoles. La titular de Cultura ha confirmado que “esta es, sin duda, una de las piezas más importantes y de mayor calidad de esta destacada exposición, pionera en España, que ha despertado el interés del público con más de 11.100 visitantes registrados en solo tres semanas”.

La propuesta se inauguró el 13 de abril con una réplica del fresco de Pompeya que ha sustituido temporalmente la original mientras se resolvían los trámites burocráticos para su salida de Japón. En este país se exhibió el fresco anteriormente como parte de una exposición temporal. La operación ha contado con el beneplácito y la supervisión de la comisaria de la exposición, Rossella Rea, así como de los técnicos del MARQ y del museo napolitano.

La pieza es una pintura mural que muestra los disturbios en el anfiteatro de Pompeya acaecidos en el año 59. La escena se pintó entre ese año y el 79 (destrucción de la zona por el Vesubio), en el siglo I d.C.  Se trata de uno de los pocos frescos romanos -contradictoriamente gracias a la desgracia de la erupción del Vesubio- que han llegado hasta nuestros días en un excelente estado de conservación, lo que refleja la capacidad y profesionalidad de los técnicos del MANN.