Los hoteleros piden al Gobierno empezar ya a negociar el Imserso

Nada más tener conocimiento del anuncio del Gobierno sobre la puesta en funcionamiento de nuevo del programa de vacaciones sociales del Imserso, los hoteleros han reclamado que toda la tramitación se lleve a cabo con la mayor urgencia posible “y sin perder un minuto” porque se
requieren unos plazos mínimos y porque consideran que este programa será uno de los instrumentos más oportunos para comenzar la recuperación del turismo español el próximo otoño.

La Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) así lo ha trasladado a la Secretaría de Estado de Turismo y al propio Imserso porque “las semanas pasan y si queremos tenerlo todo listo para la venta en septiembre no queda mucho tiempo para trabajar”. De hecho,
los hoteleros estiman que el plazo mínimo para logran un buen programa y completar la tramitación oscilará en torno a los seis meses.

El objetivo con el que se creó el programa en 1985 era el de mantener el empleo en las zonas turística en concreto en la temporada baja. En 2021 dicho objetivo adquiere más valor al tratarse de una de las actividades más castigadas por la pandemia. “Todos los esfuerzos y proyectos para levantar la actividad turística cuando se alcancen las condiciones de seguridad serán pocos” sostienen desde Hosbec, la patronal valenciana, quienes consideran que la puesta en marcha del programa, por sus
implicaciones, debe ser “una cuestión de Estado”.

Todo ello ha llevado al sector a demandar un inicio inmediato de la negociación del nuevo programa para lograr un acuerdo basado en la negociación que permita conseguir “un producto sostenible” con el que poder trabajar otros 25 años. “Su trascendencia social y económica no permite perder ni un día” añaden.

Pese a todo, los empresarios hoteleros recuerdan que en los últimos años los responsables del Imserso “obviaron” las recomendaciones del sector, lo cual se tradujo en un importante deterioro al trabajar con un programa que se encontraba “del todo punto fuera del mercado”. Es ahora, en
opinión de la patronal hotelera cuando se abre una “oportunidad de oro” para reformular el programa porque habrá “una demanda más que suficiente para cubrir incluso ampliaciones de cupo y períodos”.

En ese sentido, los empresarios plantean que esta primera anualidad debería tener un carácter extraordinario y pusiera en el mercado alrededor de 1,5 millones de paquetes vacacionales para ser comercializados. Además, deberían extenderse en el tiempo “hasta que la demanda se haya recuperado de los efectos de la pandemia”.