La desidia del Gobierno expone a la policía fronteriza a una crítica situación

La migración controlada más importante de las que existen en el mundo se produce anualmente en la frontera entre España y Marruecos y, este verano, después de dos años con grandes limitaciones, desde su inicio viene marcada por graves problemas. La falta de coordinación y planificación en la Operación Paso del Estrecho (OPE) por parte del Ministerio del Interior que dirige Fernando Grande Marlaska, causó el caos en los primeros días y las largas esperas en los accesos fronterizos de los viajeros a pleno sol se sucedieron durante varias jornadas.

Ahora la situación no ha mejorado mucho y, aunque el flujo es más rápido, la presión para los agentes de la Policía Nacional que controlan la frontera entre Melilla y Marruecos es máxima, debido a la que los efectivos son mínimos para realizar el control documental de los viajeros. Así lo ha denunciado el secretario general del PP de Melilla, Miguel Marín, que ha criticado "la improvisación" que ha existido a juicio en el desarrollo de la OPE.

Interior niega el desastre de la OPE y lo califica de "retenciones puntuales"

En declaraciones a los periodistas, Miguel Marín ha manifestado que "esta es una denuncia pública que hacemos debido a la situación crítica que están padeciendo los policías nacionales que trabajan en la frontera de Beni-Enzar por una OPE que se aprobó deprisa y corriendo, de manera atropellada e improvisada, y sin ningún tipo de organización previa".

Dos o tres policías para miles de viajeros

El número dos de los populares melillenses ha señalado que esta situación ha derivado en que el operativo que está prestando el servicio en la frontera "sea de tan solo de dos o tres policías cuando el número de cabinas que existen es de seis".

Según el portavoz del PP "hay la mitad o menos de la mitad del operativo de policías nacionales en cabina necesarios para poder atender ese punto, por lo tanto es claramente insuficiente y eso lo sabe cualquier persona menos la delegada del Gobierno, que tapa de manera permanente la incompetencia y la desidia del Gobierno de Pedro Sánchez y de ella misma con nuestra ciudad".

El secretario general del PP ha criticado que "el estrés al que están siendo sometidos estos policías es extraordinario porque en realidad la frontera de nuestra ciudad debería tener por turno de seis policías nacionales mínimo, uno por cabina, para que el servicio se preste en las mejores condiciones y para que la presión no recaiga en el propio policía".

Por todo ello, ha subrayado que "desde el PP creemos que son necesarios más policías nacionales en la frontera entre Melilla y Marruecos de manera inmediata e instamos a que pongan seis policías nacionales en cabina por turno".