División entre miembros de Cs por difundir un relato contra el PP de Benicàssim

De crisis de Gobierno a crisis de partido. La portavoz de Ciudadanos y vicealcaldesa en el Ayuntamiento de Benicàssim, Cristina Fernández, emitió un duro comunicado contra sus socios de Gobierno -el PP cuenta con seis representantes y Cs con tres- en el que acusaban a la alcaldesa Susana Marqués de “autoritaria y desleal” por redactar los ejes de los presupuestos para 2022 sin negociar previamente con su formación.

Sin embargo, tan sólo un día después de las declaraciones, el ‘número dos’ del partido naranja, Javier Alonso, ha desmentido sus acusaciones tras confirmar que él mismo estuvo presente en la reunión de los presupuestos para perfilar algunos datos de las cuentas y se optó por remitir un comunicado de prensa oficial a fin de explicar que la cifra global ascendería a los 28 millones de euros pero sin concretar los detalles. "Yo formo parte de un equipo de gobierno y, como tal, asisto a las reuniones del equipo de gobierno", sentencia Javier Alonso. 

La polémica surgió a raíz de la nota de prensa en la que Ciudadanos denunciaba haber conocido a través de la prensa la propuesta presupuestaria. En la misma información se adjuntaba una fotografía y múltiples declaraciones de la portavoz del grupo municipal para reprochar esta actuación al Partido Popular y mostrar su preocupación por la “deriva autoritaria” que estaba mostrando la primera edil de la localidad. “Una vez más, Susana Marqués, vuelve a mostrar su gen autoritario basado en el yo, mi, me, conmigo. Gobierna en coalición con tres concejales de Ciudadanos, pero actúa con el rodillo de quien cree tener una mayoría absoluta. Este nuevo acto de traición institucional demuestra que vive en una realidad paralela, cada vez más aislada. No es la primera alcaldesa del PP que cree estar por encima del bien y del mal, incluso de la disciplina de su partido”, reza el escrito.

A preguntas de ESdiario, la síndica de la formación en Les Corts, Ruth Merino, reconoce no estar al corriente del suceso más allá de las “discrepancias” en la gestión que, en opinión de lo que le había transmitido la vicealcaldesa, obedecían al carácter “autoritario” de la alcaldesa popular. No en vano, entiende que se trata de una circunstancia que "no debería ocurrir” porque en la administración de un municipio “tan importante” como Benicàssim todos los miembros del consistorio “deben trabajar unidos en beneficio de los ciudadanos”.

Por su parte, desde el Partido Popular de la localidad han declinado hacer declaraciones al asegurar que están centrados en "la gestión" y en poder aprobar el presupuesto de la localidad. Cabe recordar, que esta no es la primera vez Ciudadanos hace públicas las desavenencias con su socio de gobierno puesto que tanto durante la negociación entre ambas formaciones tras las elecciones como en varias ocasiones, las chispas han saltado entre los dos partidos.