
Por más que el presentador de Telecinco le insta a hablar de su sexualidad abiertamente cada vez que los paparazzi le fotografían con Fran Antón, el colaborador sale por peteneras.
Kiko Hernández fue pillado (una vez más) el pasado fin de semana con Fran Antón en Nueva York y después de que el martes Jorge Javier Vázquez le instara a salir del armario, este miércoles acudió a Sálvame Diario para halar de su amistad con el actor. Desde hace meses el programa no deja de hacerle un tercer grado a su colaborador para sonsacarle qué hay entre ambos, pero lo cierto es que él siempre dice lo mismo: "Somos amigos".
"No voy a hablar del viaje ni de mi intimidad ni de mi privacidad", señaló Kiko, fiel a lo que siempre ha sido: hermético con su vida privada. Por eso, desoyendo los consejos de su "jefe" Jorge Javier, se limitó a decir que "desde hace dos años" no es tan feliz como ahora, ya que le dejó claro a Vázquez que ahora "soy muy, pero que muy, feliz".
Eso sí, recalcó que "no le voy a poner nombre a nada, ahora mismo soy amigo de esta persona" y que si "el día de mañana surge algo más, puede surgir, que no surge nada, pues no surge nada". De paso, se deshizo en halagos hablando de Antón: "Fran es un amigo que mucha gente desearía tener" y concluyó su discurso desvelando que "ahora mismo tengo la vida perfecta y no la cambio por nada".
Asimismo recordó que "en 20 años nunca he contado estoy con Pepita y lo voy a mantener así", por lo que "jamás voy a abrir la puerta", del armario, se sobreentiende. En cuanto al viaje, el colaborador si desveló que fue un regalo que le hicieron en Navidad, decidió ir con su amigo y se lo ha pasado muy bien.