Mayte García, exesposa de Santi Cañizares, rompe su silencio sobre la ruptura

Este verano y de mutuo acuerdo Santiago Cañizares y Mayte García anunciaron su separación tras 13 años de matrimonio. A través de sus respectivos perfiles de Instagram ambos confirmaban la noticia que sorprendió a muchos después de la gran unión que habían mostrado en los peores momentos de su vida.

Tras pasar las vacaciones por separado, como publicó ESchismógrafo de la mano de Kike Calleja, Mayte comenzó una nueva vida también laboral como madrina de un nuevo vino verdejo.

Ahora, García ha roto su silencio concediendo la primera entrevista para la revista ¡Hola! en la que  habla tanto de su separación de Cañizares como de la pérdida de su hijo Santi en 2018 a causa de un meduloblastoma, un tumor maligno que comienza en el cerebelo.

"Ningún divorcio es fácil y menos después de haber compartido tantos años juntos y tantas vivencias. Pero cada separación es diferente y, en nuestro caso, hemos sido muy humildes y hemos sabido cuidar la parte emocional, intentando no hacernos daño", apunta sobre su divorcio, que se ratificó hace pocas semanas.

Descubrimos dónde se refugian Santi Cañizares y Mayte García tras su separación

Sobre los motivos que les llevaron a tomar una decisión tan importante, Mayte García explica que "he aprendido que la felicidad son momentos. Y era precisamente yo la que no estaba siéndolo y estaba faltando a la promesa que le hice a mi hijo: ser feliz cada día. Necesitaba frenar y cuidarme emocionalmente".

Mayte García habla de las cosas "irreparables" que les han pasado

"Creo que, cuando un matrimonio se separa, no hay un único culpable. En nuestro caso, siempre ha habido mucha comunicación, cariño y respeto. Pero cuando te pasan cosas irreparables, como es la pérdida de un hijo, evolucionas a pasos agigantados y priorizas cosas a las que antes no les dabas importancia. Y otras a las que les dabas mucha importancia y ahora son insignificantes. Cada uno estaba tomando caminos diferentes que nos hacían sentir más felices, pero como matrimonio estábamos cada vez más alejados. Y creo que eso hay que respetarlo. Ya hemos perdido mucho y hay que ser humildes y aceptar que, si ya no éramos el matrimonio idílico que habíamos conseguido ser, podríamos seguir siendo unos padres maravillosos para nuestras hijas y apoyarnos el uno en el otro, como siempre lo hemos hecho", relata la ya exmujer de Santiago Cañizares.

En cuanto a cómo lo han llevado sus hijas, Mayte cuenta que "después de todo lo que les ha tocado vivir, están en otro nivel. Son auténticas luchadoras. Me emociono solo de pensar en ellas. Se lo han tomado bien. Ellas han vivido separaciones traumáticas cercanas a la familia y lo único que nos pidieron es que siguiéramos llevándonos igual de bien que hasta ahora y que pudieran sentir que tenían una familia unida".