Rocío Carrasco se transforma ahora en “la buena hermana"

La hija de Rocío Jurado es una caja de sorpresas. En uno de los últimos capítulos de su docuserie En el nombre de Rocío muestra su compasión, cariño y cercanía a su hermano menor José Fernando. Es otra mujer hablando de un miembro de su familia. Rocío Carrasco llega a asegurar que lo ha perdonado. Craso error. Para conceder el perdón hay pedirlo y a ESdiario no le consta que esto se haya producido. Concederlo no cuesta dinero. A veces no tiene sentido cuando no hay emisor que lo pida. Es una institución básica en Derecho Civil y en los temas relacionados con Injurias y Calumnias. A Rocío Carrasco este tema le puede resultar un tema lejano. A su marido no tendría. Visto lo visto, la caja "lucrativa" está por encima del Estado de Derecho.

La última intervención de Rocío Carrasco vuelve a ser llamativa. Se siente cerca de su hermano "el que tiene problemas" y no empatiza con su hijo "el que vive en su mundo". Es curioso pero la diversidad humana es tan amplia que incluso hay quien pueda entender que Carrasco se siente más cerca de su hermano José Fernando al que no asistió ni con el cariño cuando José Ortega Cano estuvo en prisión. Eso fue lo que le pidió el marido de su madre. Quedó en el olvido.

Rocío Carrasco visitaba frecuentemente a Ortega Cano tras su accidente en Sevilla

El día que el torero cartagenero regresa a su domicilio madrileño de Fuente del Fresno después del accidente en Sevilla donde pierde la vida Carlos Parra, Rocío Carrasco visita a Ortega Cano día sí, y día también. Las visitas son frecuentes. Fidel Albiac, la sombra alargada del ciprés, también la acompaña. De la noche a la mañana todo cambia. Del todo a la nada. La respuesta se desconoce. Quizás la dé algún día. Horas ha tenido para poder contarlo.

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Carrasco ahora se posiciona cerca de su hermano "adicto". Es ella la que habla de adicciones. Es la misma hermana que sacó documentación de un menor para hablar de José Fernando en su historia. De sacar documentación privada de un menor a ser la hermana ejemplar. Las personas no somos río y podemos dar un giro de 180 grados. A veces el giro es de 360 creyendo estar en otra posición a la agujas del reloj.

El acercamiento que muestra Rocío Carrasco con su hermano es curioso cuando el acercamiento con su hijo es nulo. Cuestión de prioridades y rellenar un guión.