Doña Letizia "no se deja aplastar por su suegra" en un artículo desconcertante

Se hace eco esta semana en su blog de Yo Dona Carlos García Calvo de lo que le ha extrañado un artículo de Paris Match que se dedica a alabar exageradamente a la medida docena de mujeres plebeyas que han enamorado a lo monarcas o herederos de coronas europeas con su sex appeal.

Le extraña entre otras cosas porque este tipo de artículos son más propios de la prensa rosa pero también matiza que en esta ocasión el reportaje "tiene un punto de acidez inusual".

De hecho, la periodista Aurélie Raya no solo "hace hincapié en que estas plebeyas están intentando "normalizar" a las dinastías algo endogámicas en las que han entrado, acabando con un protocolo anquilosado" sino que "también le dedica muchas líneas un tanto desconcertantes a la Reina de España".

Véase: "Uno de los cometidos de una familia real es el de ofrecer a sus súbditos un comportamiento irreprochable y que les sirva de inspiración. Letizia de España, antigua periodista, lo consigue sin ningún error en el palacio de la Zarzuela. Ella y Felipe han barrido los nubarrones negros del final del reinado de Juan Carlos. Ella jamás toleraría que su marido fuera a cazar bellos (sic) elefantes en Botswana, ni engañase al fisco (resic). Letizia contribuye a relanzar el aparato Borbón, proyectando la imagen de una madre protectora, sensata y firme, que no se deja aplastar por su suegra".

Según García Calvo, "la prensa internacional tiene una visión edulcorada y totalmente diferente sobre SM la Reina a la que tenemos la mayoría de los españoles, con la excepción de nuestra prensa cortesana y babosa" y se pregunta en voz alta: "¿Qué pensaría si le dijésemos que la actividad oficial de Doña Letizia esta semana se limitó a dos actos de menos de una hora cada uno?". 

Para concluir señala que "los spin doctors de Zarzuela deberían de tener ideas más brillantes que la de vestir a la Infanta Sofía con un jersey antiguo de su madre".