| 29 de Febrero de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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Elche 1 - Real Madrid 1: Una uva sin pelar

Después de una buena primera parte del Real Madrid en Elche, un claro penalti de Carvajal sirvió al cuadro ilicitano para empatar y al Real Madrid para perder comba con el Atlético.

| Miguel Queipo Deportes

Parecía un partido regalo y al final fue la puñetera uva número doce, la que impide que cumplas con las campanadas del nuevo año. Esa que te meten a traición sin pelar y con pepitas. El Elche, que acudía como cenicienta al duelo con un Madrid en racha, logró empatar (1-1) a base de hacer su juego, defender y atacar sólo si se alineaba Júpiter con Saturno y con una botella de Reflex del congelador. Más allá de la rarísima actuación arbitral, el Madrid no mereció más que eso, el empate, que vuelve a descolgarle de la lucha por Laliga pese a todo lo que queda por jugarse.

Al Madrid pareció tocarle un regalo navideño en el Martínez Valero, y lo recibió sigilosamente, a lo amigo invisible, sin dejar nada a cambio. El Elche tiene unas limitaciones tremendas en ataque, y en defensa hace lo que puede, así que parecía una bicoca para los de Zidane y el guión parecía seguir cada línea ya escrita. El francés apostó por Asensio y Marcelo por la banda izquierda, y la entrada de ambos se notó y para bien: fueron un soplo de aire fresco después de la tacada de partidos consecutivos con Mendy en el lateral y Rodrygo o Vinicius alternado más adelante.

La entrada de Marcelo le dio a los blancos algo de lo que han carecido durante todo lo que llevamos de temporada: fantasía. El brasileño apareció mucho mejor físicamente que en otras comparecencias del curso, apareciendo por dentro y por fuera, y dándole a su equipo una opción extra en ataque que sirve para desmadejar defensas del mismo modo que se mondan mandarinas. Zas, zas.

Un zapatazo de Marcelo al larguero, llegando de segunda línea aprovechando el espacio que le dejó un Benzema tirado a banda, fue su sello de presentación. Atrás, obvio, cometió algún error de esos tan suyos. Pero este Marcelo es el que ha venido siendo el mejor lateral izquierdo mundial de los últimos veinticinco años, y que deje pinceladas de lo que fue es una muy buena noticia.