El Barça, indignado con España por la convocatoria de los Juegos Olímpicos

Crece la indignación en el seno del Fútbol Club Barcelona. En el club catalán se encuentran muy molestos con la convocatoria de la selección española para los Juegos Olímpicos y lejos de remitir, su enfado va a más conforme avanzan los días. No acaban de entender la decisión de llamar a Pedri y a Eric García para Tokio 2020. 

Según apunta 'Mundo Deportivo' en su edición de este sábado, en la entidad presidida por Joan Laporta no ha sentado nada bien la elección de sus dos futbolistas para la cita olímpica en la que España debutará el 22 de julio ante Egipto. Pedri y Eric García están disputando actualmente la Eurocopa, con el combinado de Luis Enrique en semifinales, y apenas van a poder descansar antes de viajar a Japón.

Especialmente complicada es la situación del centrocampista canario. A sus 18 años, Pedri ha sido una pieza importante en el esquema de Ronald Koeman esta temporada -participó en 37 de las 38 jornadas de liga, por ejemplo- y lo está siendo también para Luis Enrique. Titular indiscutible en el torneo continental, solo se perdió los últimos minutos de la prórroga ante Suiza. Además, en los partidos se puede apreciar que llega muy justo al tramo final, aunque su inteligencia futbolística y su calidad le permiten sobreponerse al cansancio físico.

El caso de Eric García es diferente porque no ha tenido tanta participación en la Premier League con el Manchester City, por lo que llega más fresco a este momento de la temporada. No obstante, en el Barça consideran que debe descansar en condiciones antes de encarar el próximo curso, el primero en el que vestirá la elástica azulgrana con el primer equipo.

En la lista de Luis de la Fuente aparece un tercer futbolista del Barça, Óscar Mingueza, pero sobre él no hay ninguna queja puesto que está de vacaciones.

La misma situación de Pedri y Eric García la vivirán Unai Simón, Pau Torres, Oyarzábal y Dani Olmo, quienes también repetirán Eurocopa y Juegos Olímpicos. En un primer momento, los clubes afectados plantearon elevar una queja conjunta a la RFEF, pero finalmente la idea se ha perdido por el camino.

Y es que lo que peor ha sentado al Barcelona, al igual que al resto de clubes, son las formas. De la Fuente no llamó a ninguno de los equipos para consultar la disponibilidad de los jugadores para llegar a un punto de entendimiento en común. Esa manera unilateral de actuar no ha sido bien recibida por una indignada cúpula culé.