Inglaterra gana en la prórroga y estará en la final ante Italia

El It's coming home está más cerca. Inglaterra buscará conseguir su primera Eurocopa ante Italia tras vencer 2-1 en la prórroga a Dinamarca. 

La primera parte fue de los ingleses, a pesar de no crear verdadero peligro hasta después del primer gol de Dinamarca. Los de Southgate tenían la bola y se movían con rapidez por el campo. Casi cumplido el primer cuarto de hora, Sterling no culminaba una gran jugada personal en el pico del área. El remate le salió muy blandito.

Dinamarca se agarraba a alguna contra y a una jugada a balón parado. Y así llegó su tanto. A la media hora de encuentro, desde 30 metros, Damsgaard soltó un obús que se coló en la portería de Pickford. El esférico, eso sí, iba algo centrado, pero con una velocidad tremenda. A pesar de que el meta inglés rozó la bola, no pudo hacer nada. Los daneses recurrían al espíritu del 92, cuando obtuvo su primera y única Eurocopa.

Apenas nueve minutos después Sterlingn a quemarropa, tuvo una clarísima, que sacó Schmeichel con la barriga, haciéndose gigante, como debe hacer un portero en una jugada así. Inglaterra, que andaba algo nerviosa, avisaba y sesenta segundos más tarde encontraba el empate. Un balón al hueco delicioso de Kane dejaba solo a Saka, que buscó el pase de la muerte a Sterling y Kjaer, que no podía hacer otra cosa que lanzarse al suelo para intentar taparlo, se la metió en propia puerta.

Con tablas en el marcador terminó la primera parte. Los primeros instantes de la segunda mitad, en cuanto a control de juego, comenzó algo más igualada, aunque Inglaterra continuaba llevando mayor peso. En el 54’ los británicos pudieron ponerse por delante tras un gran cabezazo de Maguire 54, pero Schmeichel decidió hacer la parada de la Eurocopa.

Corrían los minutos y los de Southgate tenían más sensación de peligro, pero solo eso: sensación. Ninguna ocasión clara en ninguno de los dos conjuntos y Dinamarca acabó bien metidita en su área para forzar la prórroga. Lo consiguió.

Y la prórroga se decantó, sin duda, del lado de los ingleses. En el 93 un tiro cruzado de Kane, el mejor del partido, puso en apuros al portero danés y ocho minutos más tarde llegó Sterling cayó dentro del área. Penalti muy, muy dudoso. El colegiado lo vio claro, pero la repetición deja claro que es el británico el que hace mucho más por besar el verde.

Kane lo falló, pero el rechace le favoreció y batió, a la segunda, a Schmeichel. Dinamarca no podía más. Una Eurocopa, la de los nórdicos, para enmarcar, sobre todo después del susto que dio Eriksen, la estrella del equipo, en la primera jornada del torneo.

Inglaterra llega por primera vez a la final de la Eurocopa. Espera Italia.