Cristiano Ronaldo pasa por la Audiencia de Madrid en plan estelar

Como si de una gala del Balón de Oro se tratara, Cristiano Ronaldo, en compañía de su pareja, Georgina Rodríguez, ha pasado en la mañana de este martes por la Audiencia Provincial de Madrid. Una tropa de fotógrafos, admiradores y curiosos se ha concentrado en la entrada de la sede judicial, por la que también ha desfilado su excompañero Xabi Alonso.

14,7 millones es lo que pide la Fiscalía al exfutbolista del Real Madrid. Sonriente, vestido de negro, con gafas de sol firmadas con su nombre y zapatillas blancas, y junto a Georgina Rodríguez, que aparecía también de negro con leggins y botas y un abrigo en burdeos llegaba a la sala judicial en un ambiente más de estreno o de gala de premio que de conflicto de tribunales.

Aunque la defensa de la estrella lusa del fútbol había pedido autorización para acceder a la sede judicial por el garaje como hace dos años en Pozuelo, la petición no ha sido concedida.

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CR7 ha acudido a la Audiencia para ratificar al pacto que llegó con Hacienda por haber defraudado entre los ejercicio fiscales de 2011 y 2014.  Ante los magistrados que componen la Sección 17, el exdelantero merengue ha tenido que que reconocer los delitos fiscales de los que le acusa la Fiscalía.

Lo ha hecho a cambio de dos años de cárcel sin ingreso en prisión y el pago de una multa de casi 19 millones de euros, que ya ha sido liquidada.

Para validar el acuerdo, Ronaldo ha debido  admitir los hechos de los que le acusa la Fiscalía que se aprovechó de "una estructura societaria creada en 2010 para ocultar al fisco las rentas generadas en España por los derechos de imagen".

El asunto ha sido un visto y no visto y en apenas veinte minutos salían mientras firmaba autógrafos uno detrás de otro. Una furgoneta les estaba esperando dentro del círculo policial donde se han montado los dos y han desaparecido del lugar.

Alonso y el fraude fiscal

Antes de la aparición estelar de Cristiano y Georgina, llegaba Xabi Alonso a los mismos juzgados acompañado de una intensa lluvia de flashes. El también exfutbolista del Real Madrid debe responder ante la justicia por unos supuestos delitos de fraude fiscal que habría llevado a cabo en los ejercicios de 2010, 2011 y 2012.

Para Alonso se piden cinco años de cárcel y el pago de una multa de 4 millones de euros. Además, también se le exige el pago de algo más de 2 millones de euros a la Agencia Tributaria como abono por el perjuicio causado a la Administración Tributaria.