El despido de Mourinho del Tottenham podría perjudicar al Madrid

En medio de días difíciles para el mundo del fútbol, conmocionado por las repercusiones que podría tener el anuncio de la creación y posterior crisis de la Superliga Europea, el Real Madrid podría verse inmiscuido en otros problemas que podrían pasar desapercibidos. Uno de ellos, sería tener que lidiar nuevamente con Gareth Bale o traer de vuelta a Sergio Reguilón, que se encuentran vistiendo la camiseta del Tottenham Hotspur en condición de cedidos.

La irregularidad en la Premier League ha terminado por pasar factura a José Mourinho, que ya ha sido destituido como entrenador del equipo londinense. A pesar de haber tenido un buen comienzo en el torneo, siendo incluso líder durante las primeras jornadas, la decadencia ha sido evidente y a la directiva londinense no le ha quedado otra que prescindir de los servicios del portugués.

A ello se suma la dolorosa derrota en la Europa League tras una remontada del Dinamo de Zagreb durante una eliminatoria en la que los Spurs partían con ventaja. Ni la clasificación a la final de la Carabao Cup ha servido para salvar la gestión del luso, que deja al Tottenham en la séptima casilla de la Premier, a cinco puntos de los puestos que dan acceso a las competiciones continentales.

No obstante, Mou parecía haber encontrado la clave para hacer que Gareth Bale pudiese brillar de nuevo. El galés sumó 10 goles y tres asistencias en los últimos compromisos, algo que no solo sería de ayuda para el conjunto del norte de Londres, sino para el propietario de su ficha, el Real Madrid, que podría aprovechar el resurgir para aumentar un poco su coste en caso de optar por ponerlo en venta.

Por otra parte, Sergio Reguilón se había ganado una plaza con los Spurs, siendo titular en más de 20 encuentros en los que dio cinco asistencias. Incluso en Valdebebas estaban considerando la opción de traerlo de vuelta para aprovechar el buen momento que vivía en el torneo inglés.

Ambos jugadores parecían haberse acoplado a las dinámicas de Mourinho. Sin embargo, ahora la incertidumbre se cierne sobre ambos ante la llegada de Ryan Manson, quien asumirá el mando del banquillo de manera temporal, posiblemente hasta que finalice la temporada en curso, aunque en última instancia su continuidad dependerá de los resultados.