| 24 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Joan Laporta, en una imagen reciente.
Joan Laporta, en una imagen reciente.

La calderilla que tendrá que pagar el Barcelona por la bravuconada de Laporta

El Comité de Competición sancionó con 150 euros, la mínima multa económica posible, el hecho de que el presidente culé entrará en el vestuario arbitral una vez concluido el Clásico.

| Agustín Díaz Deportes

A Laporta le ha salido baratísimo protestar a los árbitros. El Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol le ha sancionado con una multa menor a lo que, a buen seguro, tiene que pagar por alguna de esas comidas barcelonesas en las que ficha jugadores. En concreto, 150 euros por entrar en el vestuario del colegiado Sánchez Martínez justo después de concluir, con derrota blaugrana, el Clásico del pasado domingo

El árbitro murciano dejó constancia del incidente en el acta de la siguiente manera: "Una vez finalizado el partido y encontrándonos el equipo arbitral dentro del vestuario, accede a él el presidente del FC Barcelona D. Joan Laporta Estruch solicitando explicaciones de forma reiterada sobre algunas situaciones del partido. Ante estos acontecimientos, fue invitado a abandonar el vestuario arbitral, sin más incidencia". 

Para este tipo de incidente, la multa máxima es de 602 euros, además de la "inhabilitación o suspensión por tiempo de hasta dos meses o de al menos dos encuentros". Sin embargo, desde el club culé se pidió la mínima sanción posible, ya que, según su versión, la intención de Laporta "no fue protestar a los árbitros", sino que bajó al vestuario con la "para conocer su opinión respecto a sus decisiones", y que lo hizo "en términos respetuosos y educados".

Se supone que el presidente barcelonista protestaba por el postrero penalti de Eric García a Rodrygo, con el que el propio brasileño amplió la victoria madridista y reclamaba el mismo rasero en una jugada mucho más discutible entre Carvajal y Lewandowski en el área del equipo de Ancelotti. 

Además, según contó Juanfe Sanz en El Chiringuito, las formas del mandatario culé no habrían sido tan prudentes como argumentaba el club blaugrana. 

Sea como fuere, hasta el presidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, afeó, durante su entrevista en El Partidazo de Cope, el comportamiento de Joan Laporta. "Me pareció mal y se lo dije", comentó el dirigente deportiv0. 

No fue, sin duda, el mejor de los domingos posibles para Joan Laporta. Su equipo perdió merecidamente el Clásico ante un Madrid que no se vio obligado a pisar el acelerador en ningún momento, fue sancionado por entrar en el vestuario arbitral después del partido y vio cómo su hijo mediado era detenido, y posteriormente liberado, por protagonizar un altercado contra su pareja en una calle de la capital.