No está Gasol, pero sigue siendo España: Brillantísimo pase a cuartos

Va a ser verdad eso de que la selección española de baloncesto es una familia y que, entre quien entre en ella, se transforma en un sensacional jugador al servicio de un grupo absolutamente increíble. La vivida en Berlín hace unos instantes en una de las historias más bellas escritas por un deporte que, como ningún otro, ha dado a España todo tipo de triunfos. 

Porque los chavales que acaban de dar la sorpresa del campeonato eliminando a Lituania en los octavos de final del Europeo (104-92 tras una prórroga) se merecen un absoluto monumento. Su partidazo ha sido excelso, especialmente en un último cuarto memorable con una defensa espectacular y una seriedad que para sí la quisieran algunas de las selecciones que se presumen favoritas para entrar en el podio de este Europeo. 

Porque España, en absoluto es una de ellas, o quizá habría que hablar en pasado. Retirada la mejor generación de jugadores de baloncesto que verán nuestros ojos, con jugadores capitales lesionados y con una lista de baloncestistas que solo los más versados conocen, el equipo que sabiamente entrena Scariolo ha dado una absoluta lección de carácter, entrega y fundamentos tácticos. 

El partido fue igualado en el primer cuarto, que comenzó con 8 puntos consecutivos de Willy Hernangómez y acabó con 18-17 en el marcador a favor de Lituania. En la segunda manga, los lituanos, con jugadores que son estrellas en la NBA y en la Euroliga, impusieron su mayor calidad individual y dieron a unas ventajas que bordearon los 5 puntos y que en el tercer cuarto llegaron a ampliar hasta los 9. 

Pero en ese instante, justo cuando comenzaba el cuarto definitivo, más de un lituano pensó que ya había vendido la piel del oso y olvidó que ni siquiera había terminado de cazarlo. Fue en ese momento en el que España, con un espectacular Alberto Díaz, comenzó a defender creando jaulas de las que los portentosos triplistas lituanos empezaron a sentirse incapaces para salir. 

Estratosférico Lorenzo Brown

Y fue ahí, con el aliento en el cogote de los lituanos, cuando emergió la figura inconmensurable de Lorenzo Brown, que, desde su interminable tranquilidad, dio una lección de cómo se atacan todo tipo de defensas. España pudo ganar ya al final del tiempo reglamentario, pero un palmeo lituano en el último segundo forzó la prórroga. 

Ya en el tiempo extra, un triple estratosférico del base estadounidense nacionalizado español puso al combinado de Scariolo con 7 puntos de ventaja. La última reacción lituana dejó esa ventaja en solo 1 punto, pero ahí, dos extraordinarias defensas y buenas jugadas en ataque, acabaron con un histórico triunfo español, con Brown (28 puntos) y Willy Hernagómez (22 puntos) como jugadores más valorados. Pero ahora es momento de seguir soñando. España jugará el martes contra el vencedor del Finlandia-Croacia por un puesto en las semifinales. Sería la pera.