El Supremo recula y deja en el aire quién pagará el impuesto de las hipotecas

Un día después de conocerse la sentencia que obligaba a los bancos a pagar los impuestos de las hipotecas, el Tribunal Supremo ha dado marcha atrás. 

El alto tribunal ha hecho público un comunicado este viernes en el que explica que avocará a un Pleno compuesto por más de 30 magistrados el primer caso que les llegue relativo al sujeto pasivo -a quien corresponde pagar- el Impuesto de actos jurídicos documentados.

Lo hace, según explica en una nota el presidente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del alto tribunal, Luis María Díez-Picazo, por tratarse la decisión conocida ayer de un "giro radical" en la jurisprudencia y habida cuenta de "su enorme repercusión económica y social".

Esta marcha atrás llega tras horas de zozobra en la banca, que estaba sufriendo por segundo día consecutivo importantes pérdidas en bolsa tras conocerse la decisión del  Supremo de que tenía que ser el banco y no el cliente el que debía abonar el impuesto sobre actos jurídicos documentados en la firma de una hipoteca.

Ahora esta nueva decisión judicial deja en suspenso una medida que la agencia Moody's calculaba en un impacto de entre 3.500 y 4.000 millones de euros, un importe que otros analistas elevan.

El jueves, tras la sentencia Supremo, los bancos  sufrieron descensos sustanciales, todos ellos por encima del 2%. Sabadell cedió un 6,70%, Bankinter un 6,27%, Bankia un 5,11%, Caixabank un 4,54%, BBVA un 2,70% y Santander un 2,05%. "El impacto ha sido algo más limitado en Santander y BBVA, que cuentan con un negocio internacional significativo que no se verá afectado por esta sentencia judicial", explicaba Felipe López-Gálvez, analista de Self Bank. Sabadell, Bankinter y Bankia son las entidades que aglutinan las hipotecas medias de importes más elevados, por lo que el riesgo de impacto podría ser mayor en sus cuentas

Con estos desplomes, los seis bancos del Ibex 35 habían perdido en total más de 5.463 millones de capitalización bursátil en una jornada.

La sentencia de la sala Tercera del Supremo, del 16 de octubre y cuyo ponente ha sido el magistrado Jesús Cudero, interpreta el texto refundido de la ley del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales (ITP) y Actos Jurídicos Documentados (AJD) y su reglamento y concluye que no es el prestatario el sujeto pasivo de este último impuesto en las escrituras notariales de préstamo con garantía hipotecaria (como su jurisprudencia anterior sostenía), sino la entidad que presta la suma correspondiente.

Pero ahora, en una insólita reacción de alto tribunal, esta sentencia queda en papel mojado.