| 06 de Abril de 2024 Director Benjamín López

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse
Pedro Sánchez
Pedro Sánchez

Menos "paguitas" y subvenciones y más rebajas fiscales y ahorro de gasto

El Gobierno no puede quebrar las arcas públicas con subvenciones constantes a costa de subir la deuda: debe reducir impuestos y recortar el gasto público de la "industria política".

| ESdiario Editorial

 

El Gobierno ha presentado como un logro histórico para reducir el coste de la energía lo que, en realidad, es un parche temporal para toda Europa y condicionado cuyo alcance será positivo pero de corta duración y cuantía posiblemente modesta.

En realidad, la Comisión Europea se negó a aceptar las dos grandes peticiones de Pedro Sánchez: no cambiará el sistema de cálculo del recibo eléctrico con el gas como referencia y no “topará” tampoco el precio del gas.

Las razones de Europa para negarse son dos, por mucho que la pretensión española parezca razonable: rompería el mercado común y, sobre todo, podría espantar a los suministradores de gas, a los que se puede imponer un precio o una fiscalidad, pero no obligar a que te vendan su producto, beneficiado por una alta demanda para la oferta que hay sin contar con Rusia.

 

La compensación, difundida por Sánchez como un avance sin precedentes, es más retórica por el concepto de “Isla energética” que exclusiva de España y Portugal, por mucho que así la presenten ambos presidentes: se les dejará intervenir durante un tiempo, y con el visto bueno de Bruselas, el precio máximo del gas, sin alterar la estabilidad de las empresas.

Es decir, se le pone un nombre distinto a un permiso que tienen ya los 27 países de la Unión, tal y como figura en el plan bautizado RepowerUE y destinado a reducir la dependencia de Rusia; un vademécum de medidas contenidas en 26 folios y tres anexos, aprobado ya el pasado 8 de marzo, que decía literalmente lo siguiente, entre otras cosas:

“La Comisión confirma que la regulación de los precios y los mecanismos de transferencia para ayudar a proteger a los consumidores y a nuestra economía son posibles. El marco jurídico del mercado de la electricidad, y en particular el artículo 5 de la Directiva sobre la electricidad, permite a los Estados miembros, en las circunstancias excepcionales actuales, fijar precios minoristas para los hogares y las microempresas”.

España no necesita aumentar su deuda con más subvenciones: debe ahorrar en gasto político y bajar de verdad los impuestos

Sánchez aprobará este martes, además, su Plan Nacional para contener el precio de la luz, el gas y los carburantes, sin pactarlo con nadie y apostando por la subvención directa, a costa de la deuda pública, de 20 céntimos por litro de combustible, además de una serie de medidas intervencionistas en el mercado de alquiler o laboral.

Gasolina subvencionada

Junto con la "isla energética", es la respuesta global que da, durante tres meses, a una crisis para todos a excepción de para el Estado, que está haciendo un agosto fiscal con el drama económico para tantos y, sin embargo, insiste en la estrategia de las "pagas" en lugar de en la reducción de impuestos.

Porque no tampoco se plantea la otra gran medida para bajar el gasto público, reducir el peso de la deuda y poder bajar de verdad el esfuerzo fiscal de los contribuyentes: recortar el gasto de la Administración Pública sin tocar los servicios públicos ni el Estado de Bienestar, según indican la OCDE y el Instituto de Estudios Económicos en sus últimos informes: España podría mantener las mismas prestaciones y ahorrar un 14% de su gasto público y hasta 60.000 millones anuales si tuviera una gestión más profesional y no derrochara en la propia estructura institucional, pública y política.