Un mes de Feijóo: una "revolución tranquila" para pasar página del casadismo

Dos de Mayo, día de la Comunidad de Madrid y también día en el que el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, cumple un mes exacto al frente del partido desde que fuera proclamado oficialmente en el congreso de Sevilla. 30 días de transición tranquila respecto a la etapa anterior de Pablo Casado pero que ello no ha impedido un giro en la organización que entierra el casadismo en el recuerdo como si hiciera lustros de su existencia.

Este mes de Alberto Núñez Feijóo ha estado marcado por el debate económico, en el que el nuevo líder del PP ha querido poner el acento, alejándolo de otros debates más ideológicos o del debate interno en que se había instalado el PP con las luchas en Génova con los barones -en especial con Isabel Díaz Ayuso- y que estaba desangrando la imagen del partido.

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El nuevo presidente del PP se ha marcado como objetivo tomar la iniciativa ante el Gobierno en materia económica, en medio de unas crisis de alza de precios acentuada por la guerra de Ucrania, y para ello Feijóo no sólo elaboró un plan con miembros de la sociedad civil, sino que además se lo mandó y ofreció a Pedro Sánchez mostrando dos de sus banderas: la mano tendida y la bajada de impuestos.

Feijóo insiste en uno de los argumentos que ha funcionado al PP en las comunidades donde gobierna: ser la vanguardia de las bajadas de impuestos como forma de desahogar a las familias y empresas que sufren la crisis e incentivar la economía.

Feijóo saluda a su llegada a los actos del Dos de Mayo este lunes.

En este mes, el nuevo presidente del PP también ha vuelto a abrir el canal de comunicación con Moncloa, sin cerrarse a acuerdos de estado en materia económica o de renovación del CGPJ, pero sin ceder en las máximas económicas del PP.

Fruto de esta mano tendida fue la reunión con Sánchez o que el PP se abriera a negociar el decreto anticrisis ante el plantón de los independentistas al presidente del Gobierno, decreto que al final el Gobierno sacó adelante apoyándose en Bildu. Jugada de Feijóo, que no se negó a hablar y fue el PSOE quien prefirió antes a los abertzales.

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En el plano más puramente político, estos 30 días de Feijóo confirman la recuperación del partido en los sondeos, tras la crisis que sufrió el partido con la caída de Pablo Casado. Incluso el PP empieza a mejorar las marcas anteriores y en algunas encuestas vuelve a colocarse como la fuerza más votada. 

Un efecto Feijóo que ya hablan algunos medios y que tendrá su primera parada electoral este 19 de junio en Andalucía, con un partido que ahora parece una balsa de aceite de tranquilidad interna tras los fuegos pasados que abrió el exsecretario general Teodoro García Egea.