| 19 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse
Jaume Asens
Jaume Asens

El portavoz de Podemos se desata con una brutal petición contra el Rey

Jaume Asens, presidente del grupo confederal de Unidas Podemos, no se ha andado con medias tintas, pidiendo una medida más propia de independentistas radicales que del partido en el Gobierno

| A. Jiménez España

Podemos tiene un objetivo, un "horizonte republicano", como dice Pablo Iglesias. Y es que cada vez que la figura del Rey sale a colación los decibelios de la formación suben sin cesar, exigiendo que Felipe VI sea arrinconado.

De hecho, ya no hay problema en anunciar sin pudor que "sería fantástico que el Rey no volviera más a Cataluña", una frase pronunciada por el presidente del grupo parlamentario de Unidas Podemos, Jaume Asens, en Radio 4, que choca frontal mente con la versión del ala socialista del Gobierno que asegura que su ausencia en la entrega de despachos es para "proteger a la institución".

 Y es que, la peregrina explicación del Gobierno cae por su propio peso cuando el ala morada expresa su opinión. Para el dirigente de Podemos, que fue durante algún tiempo la mano derecha de Ada Colau, la presencia del Rey en Cataluña incomoda a la gente porque "le hace responsable de todo lo que sucedió" tras el referéndum de independencia de 2017. "Hizo un discurso que marcó un antes y un después. Que no surgió de Moncloa, sino de Zarzuela", ha recordado.

Por ello, ha pedido restringir aún más las apariciones del monarca, insistiendo en la "necesidad" de llevar al Congreso una ley que "regule las funciones" del Rey y que, a su vez, las limite. "Porque no es normal, lo que pasa en España no pasa en otros países con monarquías parlamentarias", ha señalado.

Así, desde Podemos abogan por reducir la figura de Felipe VI a la mínima expresión, con contadas apariciones, siempre ante una estricta neutralidad  y más como un 'objeto decorativo' que como un Jefe del Estado., pero eso sí, hasta que consigan alcanzar su deseado 'horizonte republicano'.