| 22 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse
Salvador Illa y Miquel Iceta aplaudiéndose mutuamente.
Salvador Illa y Miquel Iceta aplaudiéndose mutuamente.

Empieza la partida: ERC va al choque con Illa pero si suman habrá tripartito

El tsunami causado por la candidatura de Salvador Illa ha puesto muy nerviosa a Esquerra, que va a dirigir todos sus cañones contra el socialismo. Pero solo hasta el 14 de febrero.

| Marta Gómez Montero España

 

Que nadie se llame a engaño. Lo que vamos a vivir en Cataluña hasta la celebración de las elecciones previstas para el 14 de febrero va a ser puro teatro, que diría la canción, y nada se va a dejar al azar. Están en juego muchas cosas y los principales actores, con la irrupción en escena en las últimas horas de Salvador Illa, lo saben.

Una irrupción que ha caído como una bomba en ERC, que en las últimas horas ha salido en tromba a criticar al flamante candidato del PSC. Los republicanos reconocen que Miquel Iceta era un candidato muy gastado y que Pedro Sánchez ha conseguido que Illa se convierta en el centro de la campaña. En privado admiten que les ha sentado "fatal" y que el PSC "ha hecho una buena operación".

De lo que se trata ahora es de no darle más bazas. Para ello desde el candidato de ERC y presidente en funciones de la Generalitat, Pere Aragonés, hasta el mismísimo Gabriel Rufián van a tratar de que los votantes independentistas se olviden de que si Sánchez y el PSOE están en Moncloa, es porque ellos apoyaron los Presupuestos Generales del Estado. Carles Puigdemont se va a encargar de que esto no ocurra.

Por eso tampoco quieren oír hablar ni en pintura de posibles indultos y muchísimo menos antes de los comicios catalanes. Saben que sería dar una valiosísima munición a Puigdemont, que no se ha olvidado de cómo Rufián le acuso de traidor con el celebre tuit de las "155 monedas de plata"; que le llevó a impulsar la Declaración Unilateral de Independencia.

Puigdemont tiene ganas de devolvérselas a ERC en esta campaña, y aprovechará cualquier ocasión

Puigdemont les haría beber de su propia medicina acusándoles de haber comprado su salida de prisión apoyando los Presupuestos Generales del Estado. Por eso ERC renegará de los indultos y el propio Oriol Junqueras está encabezando una campaña muy dura contra el PSC acusándole de ser lo mismo que el PP, solo que cuidando las formas.

Desembarco de Sánchez y sus ministros para apoyar a Illa

Las terminales monclovitas se han apresurado a trasladar que manejan encuestas muy favorables, desde los sondeos propios al último CEO catalán pasando por un análisis pormenorizado de las tripas del CIS. Y que con la designación de Salvador Illa, Sánchez busca mejorar aún más las posibilidades del PSC. 

Illa va a tratar de arañar el voto moderado de Cs y de los independentistas hartos de la deriva de los últimos años, con especial atención a la provincia de Barcelona, donde tienen puestas sus mayores expectativas.

Este miércoles se dejaron llevar por un desmedido entusiasmo y los socialistas hablaron, incluso, de ganar las elecciones y quedar  por delante de ERC; lo que, a día de hoy, no apunta ninguna encuesta.

La palabra clave de la campaña de Salvador Illa será la reconciliación

Para tratar de quedar lo más cerca posible de Esquerra y así negociar un tripartito en un posición de mayor fuerza, la campaña de Salvador Illa va a ser diametralmente opuesta a la que querrían los hombres de Junqueras. Illa venderá indultos, una reforma del Código Penal para rebajar las penas por los delitos de sedición y, en definitiva, una expectativa para de "reconciliación".

Una palabra que no se les va a a caer de la boca durante una campaña en la que Sánchez y muchos de sus ministros desembarcarán en Cataluña para apoyar al flamante candidato. Pero como en el teatro, cuando se baje el telón y se abran las urnas, si ERC, PSC y en Comú Podem suman, las críticas dejarán paso al tripartito.