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Salta la sorpresa: un sondeo confirma el dato más temido por el independentismo
La última encuesta del 21-D, publicado este lunes por El Periódico, prevé una participación histórica del 87%. Es la cifra en la que el constitucionalismo confía para dar un vuelco.
Los partidos independentistas tienen motivos para la preocupación y eso que el último sondeo, publicado este lunes por El Periódico, concede a Esquerra Repúblicana la victoria en los comicios del 21-D. Sin embargo, un dato histórico y sin precedentes en la historia de las elecciones autonómicas en Cataluña, avanza un posible vuelco en favor del constitucionalismo.
El Gobierno, PSOE y C's, han estimado en las últimas semanas que si la participación supera el 80%, se apuntalan y mucho las opciones para desalojar de la Generalitat al secesionismo.
Y la encuesta del diario del Grupo Zeta, realizada por la firma GESOP, contempla que la participación el 21-D puede superar incluso el 87%. En concreto, según este sondeo, el 87,3% de los catalanes están decididos a depositar sus papeletas en las urnas y superando así el ya inusual 74,9% del censo que participó en el 27-S.
Además, la encuesta tumba otro de los grandes argumentos del independentismo, la supuesta "ilegitimidad" de los comicios por haber sido convocados a través de la aplicación del artículo 155. Pero no lo ven igual los ciudadanos. Dos tercios de los encuestados consideran que el 21-D es legítimo y, entre los votantes independentistas, un 45,3% también lo cree mientras que un ajustado 46,5% lo rechaza. Para los no independentistas no cabe duda: un 85,5% las considera legítimas.
Un escenario totalmente abierto
Según la encuesta, ERC ganaría las elecciones con el 23,9% de los votos y entre 37 y 38 escaños, mientras que Ciudadanos, JuntsxCat y el PSC se disputarían el segundo puesto con una horquilla de entre 24 y 25 diputados.
La encuesta sitúa a la lista de Inés Arrimadas con una ligera ventaja y el 18,6% de los sufragios, seguido del PSC con el 18,1% y JuntsxCat -candidatura de Carles Puigdemont y el PDeCAT-, que obtendría el 16,85%.
Les seguirían Cataluña en Comú, la formación de Ada Colau, con el 8,6% de votos y entre 9 y 10 escaños, la CUP con el 6,3%, y entre 7 y 8 diputados, y el PP sería última fuerza en el Parlament con 6 o 7 escaños y el 5,7% de votos.
Así, el independentismo conservaría la mayoría absoluta de la Cámara, que en la anterior legislatura sumó 72 diputados -62 de JxSí y 10 de la CUP-, al lograr entre 68 y 71, pero perdería apoyos y no llegaría a la mitad de votos.
