La mujer de El Chicle “engaña” con descaro al juez y podría acabar en la cárcel

No se puede decir que los investigadores de la UCO de la Guardia Civil estén desconcertados pero sí desde luego sorprendidos. Rosario Rodríguez, la mujer de José Enrique Abuín El Chicle el asesino confeso de Diana Quer, acudía el pasado marte a ver a el Chicle junto a su suegra y su hija para celebrar el decimocuarto cumpleaños de la pequeña. Lo curioso es el que vehículo con el que se desplazaron es el mismo Alfa Romeo gris con el que Abuín trasladó a Diana Quer desde A pobra hasta la nave de Rianxo donde la abandonó sin vida el 22 de agosto de 2016.

Hace unos dos meses, con el caso resuelto y el vehículo analizado por completo, se le devolvió a Rosario el Alfa Romeo y es el que ella usa habitualmente. Lo sigue aparcando en el mismo lugar donde el Chicle solía dejarlo, según detalla el diario gallego, aunque es la primera vez que lo emplea para visitar al asesino confeso de la joven madrileña.

Se trata del mismo coche con el que el Chicle también intentó raptar a la fuerza a otra joven en Boiro. En aquella ocasión su plan no salió bien y gracias a dos personas presentes en la zona se evitó que la chica corriera la misma mala suerte que Diana Quer, tal y como les hemos venido contando en ESdiario.

Una situación que no ha gustado en absoluto tampoco, según ha podido saber ESdiario, al juez instructor del caso Félix Isaac Alonso,titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Ribeira (A Coruña), que había archivado de forma provisional la imputación de Rosario por encubrimiento y cuyo archivo ha recurrido el padre de Diana, Juan Carlos Quer.

Cambio radical

Según fuentes próximas al caso, Rosario Rodríguez había “roto” con su marido y paralelamente habría ofrecido toda su colaboración posible con la justicia para esclarecer con su ayuda todo lo que le ocurrió a Diana. También había expresado a los investigadores y al propio juez su intención de no acudir a visitar a su marido a la cárcel donde cumple prisión preventiva. ¿Ha estado jugando Rosario Rodríguez con los investigadores hasta ahora? ¿Ha vuelto a cambiar de opinión? Son incógnitas que ahora tratan de despejar no sin preocupación los investigadores. ¿Se ha acabado la colaboración de alguien que esperaban se tratase de un testigo clave?

Es una duda razonable que evidencia que Juan Carlos Quer puede estar en lo cierto cuando manifiesta púbicamente su convencimiento de que la mujer de Enrique Abuín, el asesino de Diana Quer, terminará siendo de nuevo imputada en la causa. El propio José Enrique Abuín escribía una carta desde la prisión a su madre en la que, además de jactarse de estar en la calle en 7 años, implicaba directamente a su mujer en el crimen.

En los próximos días puede haber sustanciales novedades.