| 28 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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Plácido Domingo en una de sus últimas actuaciones en el Teatro de la Zarzuela.
Plácido Domingo en una de sus últimas actuaciones en el Teatro de la Zarzuela.

El ministro de Cultura da el golpe de gracia a la imagen de Plácido Domingo

El Gobierno se ha dado prisa y ha ordenado a los responsables del Teatro de la Zarzuela anular las actuaciones previstas del tenor en el centro público madrileño.

| ESdiario España

Los teatros de medio mundo estudian que hacer, así que no se puede decir que la fulminante decisión adoptada este miércoles por el Gobierno sea disparatada. Pero algunos atribuyen la rapidez con la que el Ejecutivo ha actuado contra Plácido Domingo a las tendencias feministas del socio de coalición del PSOE, Podemos.

Lo cierto es que el Ministerio de Cultura ha fulminado al tenor del cartel del Teatro de la Zarzuela. El ministro, José Manuel Rodríguez Uribes, ha señalado este miércoles que era un "deber" de su departamento cancelar los conciertos que Plácido Domingo tenía previstos para el próximo mes de mayo en el Teatro de la Zarzuela, una vez que el propio artista ha aceptado "toda la responsabilidad" de las acusaciones de acoso y ha pedido perdón por "el dolor" causado.

Según ha explicado, tanto él mismo como la directora del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM), del que depende el Teatro de la Zarzuela, han tomado esta decisión "desde el momento en el que él ha reconocido los hechos y ha querido asumir las responsabilidad" de los mismos.

Hasta ahora, según ha explicado Rodríguez Uribes, la situación era "diferente" porque "hay una presunción de inocencia", pero, una vez que las acusaciones se "reconocen" y el tenor dice "que, en efecto pasó lo que pasó", deben "darse todas las responsabilidades" y así lo ha entendido su departamento.

"No es el momento de que participe en la programación", ha indicado, para señalar que se trata de "unos hechos graves que afectan a numerosas mujeres" y, para Cultura, la decisión era lo "procedente y lo justo" para las víctimas.