Drama en el PSOE: todo era una trampa de Iglesias y Sánchez ha caído como novato

Lo reconocen ya en privado este martes algunos diputados del PSOE. Pedro Sánchez va a salir de su moción de censura con un nuevo revolcón político. "Las prisas son malas consejeras", advierte a ESdiario uno de estos parlamentarios.

Y es que a la falta de apoyos suficientes que el líder socialista ha constatado en las últimas horas al cerrar su ronda de contactos con el resto de los grupos parlamentarios, se suma la novatada que Sánchez va a pagar, además, con su principal competidor por el voto de la izquierda, Pablo Iglesias. 

Iglesias revela qué trama Podemos una vez que Sánchez fracase y dinamita el PSOE

Una vez que Podemos ha certificado que la moción de Sánchez parece destinada al fracaso, Iglesias ha puesto en marcha este martes la segunda parte de su plan, destinado a dar la estocada al líder socialista.

De esta forma, Iglesias llega al final de la trampa que le tendió al PSOE el jueves pasado al garantizar su apoyo a Sánchez para que este diera el paso de presentar la moción sabiendo a la vez que el líder socialista no iba a lograr los votos necesarios.

Y es que el líder de Podemos era plenamente consciente de que los barones del PSOE no iban a permitir a Sánchez negociar contrapartidas con los independentistas a cambio de su apoyo. Eso era una línea roja en Ferraz. E Iglesias sabía también que el PNV no estaba por la labor de dejar caer a Rajoy tras aprobar los Presupuestos del año próximo.

Así, en los pasillos del Congreso, Iglesias ha anunciado que su partido presentará una nueva moción -la tercera en la que va de legislatura- que intentarán pactar con Cs para convocar elecciones anticipadas, una iniciativa que los socialistas se verán obligados a apoyar. Y todo el rédito político y mediático será para Podemos.

Sobre todo por que este lunes, Iglesias le recordó a Sánchez que si fracasa este viernes en la votación de la moción de censura su carrera política estará acabada.

Pedro Sánchez, este martes en el Congreso explicando a sus 84 diputados su moción de censura.

"Nosotros no necesitamos prestar diputados a nadie. Ciudadanos no puede presentar una moción. Nosotros sí. Estaríamos dispuestos a dialogar con Ciudadanos y ya veríamos cuál es el resultado", ha asegurado el líder de Podemos. "Nos parece sensato en caso de que fracase la moción de Pedro Sánchez, que vamos a apoyar, intentar lograr que la palabra la tengan los ciudadanos", ha sentenciado.

Y es que en el PSOE una sensación de pánico se ha instalado tras la ronda de llamadas realizada por el propio Sánchez y por su secretario de Organización, José Luis Ábalos. Tras conversar con Iglesias y con los líderes de PNV, PDeCAT, Andoni Ortuzar y Marta Pascal, Sánchez tan solo ha logrado el apoyo de Podemos. Los vascos se inclinan por el no y los catalanes por la abstención. Tampoco Joan Tardá ha dado al líder del PSOE garantías de que ERC apoyará la moción.

Ábalos ha hablado con el portavoz de Compromís, Joan Baldoví, y con el número dos de Cs, José Manuel Villegas. Ambos han defendido la necesidad de una convocatoria electoral sin que Sánchez llegue al Gobierno. El PSOE se ha puesto ya a temblar.