| 24 de Abril de 2024 Director Benjamín López

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse
Pedro Sánchez durante su intervención en el Comité Federal de este lunes.
Pedro Sánchez durante su intervención en el Comité Federal de este lunes.

Rivera sufre la primera jugarreta de Pedro Sánchez con Podemos por fiarse de él

La falta de palabra del líder del PSOE ha quedado retratada este lunes en el Comité Federal. Siempre ha jugado con dos barajas, una para C´s y otra para Iglesias, y éste es el resultado.

| Ana Isabel Martín España

Albert Rivera ya sabía que Pedro Sánchez siempre ha jugado con dos barajas, una para Ciudadanos y otra para Podemos; pero el último movimiento del líder del PSOE ha ido demasiado lejos incluso para él.

En un intento a la desesperada por sumar a Pablo Iglesias, Compromís e Izquierda Unida a ese "gobierno del cambio" que se le resiste y que le condena -salvo sorpresa- a una investidura fallida, Sánchez ha hecho a Rivera la primera jugarreta: una enmienda en toda regla al documento de 202 puntos que ambos suscribieron el martes en el Congreso de forma solemne. 

Durante su intervención ante el Comité Federal del PSOE convocado la víspera de su discurso como candidato a la investidura, Sánchez ha anunciado que propondrá a los partidos de izquierdas un pacto que irá "mucho más allá" en materia laboral, de regeneración democrática y de igualdad de género que el alcanzado con Ciudadanos. Ha hablado en concreto de "impulsar medidas nuevas que no están incluidas" en el otro pacto. Para más inri al margen del que votó y respaldó la militancia socialista el sábado. 

El secretario general de los socialistas ha querido adelantarse a la reacción del partido naranja aclarando que ese segundo acuerdo sería "coherente" con el de C's, aunque el partido naranja se ha apresurado a anunciar que sus diputados no votarán a favor de ningún acuerdo que no sea el firmado el miércoles. 

Las dudas de C's sobre la fiabilidad de la palabra de Sánchez son más fundadas. No en vano cabe recordar que el miércoles, en su primera comparecencia tras estrechar la mano de Rivera, el socialista afirmó textualmente que el acuerdo entre ambos incluía la "derogación" de la reforma laboral del PP (lo repitió dos veces para que quedara claro), de la Ley de Educación (la LOMCE) y de la Ley de Seguridad Ciudadana (la conocida entre la izquierda como ley mordaza); y, sin embargo, en el documento no figura la palabra "derogación" para ninguna de las tres.

"El documento no habla de derogación de la reforma laboral", insistía Rivera el viernes en Espejo Público. "El acuerdo deroga de facto la reforma laboral", le contradijo nuevamente Sánchez este lunes durante su discurso.  Es más. Ante las diferencias de interpretación de uno y otro partido sobre la legislación laboral, la llamada Ley Wert y otras cuestiones como la supresión de las diputaciones provinciales, el texto ya ha sufrido desde el miércoles alguna modificación.

No obstante lo que ahora pretende Pedro Sánchez no es una modificación sobre el contenido del acuerdo con Ciudadanos sino pactar a sus espaldas otro con Podemos e IU más de izquierdas.