| 26 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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Ana Rosa Quintana y Pablo Iglesias
Ana Rosa Quintana y Pablo Iglesias

La feroz guerra interesada de Pablo Iglesias contra Ana Rosa Quintana

Los problemas judiciales del marido de la presentadora de Telecinco estimulan a Podemos para tapar otros problemas del líder. Y las redes registran ese enfrentamiento.

| El Retuitero Opinión

 

 

La relación entre Ana Rosa Quintana y Pablo Iglesias es históricamente mala, pese a que en el pasado tuvieron grandes momentos de intimidad televisiva, como aquel tan recordado en el que el líder de Podemos, paseando al aire libre con la periodista, aseguró que vivir en grandes chalets era incompatible con el ejercicio de una política cercana al "pueblo". No, no hace falta que nadie recuerde lo de Galapagar: se recuerda solo.

El caso es que desde entonces todo ha cambiado, pese a que uno de los fundadores del partido, Juan Carlos Monedero, es invitado habitual de la tertulia política del programa de Telecinco que esta semana ya ha entrado en su periodo estival, con Ana Rosa fuera de pantalla y descansado.

 

 

Y la prueba de ello es cómo Podemos se ha personado en la causa que tiene al marido de la comunicadora, Juan Muñoz Tamara, para pedir -nada menos- 17 años de prisión por haber contratado supuestamente al siniestro comisario Villarejo: unos hechos que, de demostrarse, le dejarían fatal, pero que poco o nada tienen que ver ni con Ana Rosa ni con Podemos ni con el programa.  Pese a eso, la inquina es evidente:

 

 

Es uno de los cientos, tal vez miles, tuits que los seguidores de Podemos han lanzado en masa en las últimas horas para esquivar el "Caso Dina", que tiene a Iglesias de los nervios; y a la vez para intentar convertir toda crítica al partido en una conspiración de las "cloacas del Estado y los medios".

Lo cierto es que la periodista ha de sentirse incómoda por este asunto, que directamente no le afecta pese a haber compartido mesa y mantel con el lamentable policía que aparecen en todas las salsas adulteradas.

Y quizá por ello no se ha referido demasiado al caso, salvo una vez en el pasado. Prefiere correr un tupido velo, como muestra su último mensaje, ajeno a la polémica, firmado además por un destacado periodista cercano al PSOE y, en tiempos, a la Cadena Ser:

 

 

Curiosamente, Monedero ha tenido tiempo en las últimas horas para denigrar a un buen montón de medios de comunicación y programas, críticos con el Gobierno que peor ha gestionado la pandemia en todo el mundo, a tenor de la desmedida mortalidad. Pero ni una mención al espacio en el que colabora. No parece casual, y le retrata bastante.

 

 

La guerra, en todo caso, no ha terminado. Podemos está rabioso con los medios y tiene necesidad de desviar la atención: una mezcla explosiva que seguirá dando grandes tardes de gloria. Al tiempo.