Iglesias pide retener las ganancias de las eléctricas y atiza a Ana Botín

Desde que Pablo Iglesias no está en el Gobierno, como él mismo ha dicho, ya dice la verdad y “no se calla nada”. Por eso está proponiendo medidas que ni siquiera su propio partido está poniendo encima de la mesa para bajar el precio de la luz. Y una de esas “soluciones” sería la de que el Estado se haga con la mayor parte de los beneficios de las eléctricas. 

En el programa Hora 25, de la Cadena SER, el exvicepresidente del Gobierno ha empezado sus argumentos aludiendo a los pactos de la Moncloa y señalando que éstos “sirvieron para que la clase trabajadora soportara a sus espaldas las consecuencias de una crisis” y que “por eso la patronal saluda al escucharlo y los sindicatos echan mano a la pancarta”.

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Y es que para Iglesias el control de los precios debe ir marcado por el Estado, según ha defendido, y por eso critica con dureza las medidas propuestas por el Gobierno de Sánchez, aunque Podemos forme parte del mismo. El exlíder de Unidas Podemos ha asegurado también que tiene la solución para bajar el precio del megavatio hora. 

Según su posición. Éste bien básico bajaría de precio si el Gobierno obligase a las eléctricas a dar sus beneficios al Estado. Una apropiación de beneficios que no vendría acompañada, por su puesto, de una bajada fiscal, ya que entorno al 50% de la factura de la luz son impuestos. Iglesias apuesta por mantener esta carga fiscal y, además, retener estos beneficios de forma “patriótica”.

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“Las grandes empresas energéticas deberían ser un poco patriotas y compartir buena parte de sus beneficios”, ha asegurado Iglesias, al mismo tiempo que ha tenido palabras también para la presidenta del banco Santander, Ana Botín, después de que dijera que ella está bajando la calefacción en su casa para reducir la dependencia energética de Rusia. 

“Yo no sé quién asesora en clave comunicativa. Nuestra amiga Botín llegó a decir que como ejemplo ciudadano iba a bajarse tres granitos la calefacción”, ha denunciado Iglesias, aunque no ha especificado si esa misma retención de beneficios de las eléctricas las está planteando también para el sector financiero.

Por último, Iglesias ha querido también apostar por una nueva subvención que afectaría a casi 20 millones de españoles y que consistiría en una paga de 300 euros para gastos de luz y gas. Una ayuda “perfectamente viable”, según ha defendido.