| 16 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Del abrazo al hachazo: Sánchez se la juega a Iglesias a las primeras de cambio

Sitúa a Carmen Calvo en la Vicepresidencia Política para vigilar y atar en corto al líder de Unidas Podemos, de quien el presidente en funciones no se fía por más palmaditas que se den.

| A.I.M. España

La negociación del Consejo de Ministros no ha hecho más que empezar y Pedro Sánchez ya le ha hecho tragar el primer sapo a Pablo Iglesias, a quien pretende atar en corto desde el minuto uno. 

El presidente en funciones ha vuelto a encomendar la Vicepresidencia Política a Carmen Calvo, la hasta ahora número dos del Ejecutivo y una mujer controvertida en las filas de Unidas Podemos, con cuyos dirigentes tuvo sus más y sus menos durante las negociaciones de julio y septiembre. 

De hecho esta vez ha sido apartada de las negociaciones (en su lugar por el PSOE las han llevado Adriana Lastra e Iván Redondo) porque Sánchez quería que llegaran a buen puerto. Y rápido.

Calvo será así la tercera del trío de vicepresidentes, con Nadia Calviño en la parte económica y el propio Iglesias en la social. Y presidirá, como hasta ahora, la Comisión de Secretarios de Estado y Subsecretarios, la llamada sala de máquinas del Ejecutivo. 

La elección de Calvo es toda una declaración de intenciones del presidente en funciones, que pretende hacer un marcaje total al líder morado para que no intente crear un gobierno dentro de otro gobierno. Que fue, antaño, uno de los argumentos esgrimidos por los socialistas para rechazar un Ejecutivo de coalición. Y por la propia Calvo. Ella incluso dio por "casi fulminado" a Podemos en su día.

Entre los nombres que están circulando por los cenáculos de Unidas Podemos como ministrables figuran Irene Montero, Alberto Garzón, Pablo Echenique, el exJemad Julio Rodríguez, la juez Victoria Rosell y la diputada gallega Yolanda Díaz.