La guerra viene de lejos entre el líder de Podemos y el portavoz de Esquerra. Pero ahora que el catalán tiene mando en plaza, la cosa se va a recrudecer.
Son dos gallos en el corral de Pedro Sánchez. Y se llevan algún tiempo lanzándose reproches mutuamente. Es la historia de Pablo Iglesias y Gabriel Rufián, podría decirse, la de dos enemigos íntimos.
Pablo Iglesias ha defendido la necesidad de llegar a un acuerdo con ERC para poder sacar adelante la investidura del presidente en funciones y ha señalado que eso pasa por que el partido independentista asuma el "estilo" del exdiputado Joan Tardá, en lugar de los modos del actual portavoz en el Congreso, Gabriel Rufián.
"Necesitamos a una ERC con un estilo que se parezca más al de Tardá que a otro tipo de estilos, que además se han demostrado ambivalentes", ha afirmado Iglesias durante el coloquio Nudo España: un año después que ha mantenido con el periodista Enric Juliana, para abordar las problemáticas que afectan al país, un año después de la publicación del libro que coescribieron, con ese título.
Según Iglesias, "si alguien ha demostrado ser capaz de una cosa y la contraria es Gabriel Rufián", y eso, aunque algunos puedan considerarlo "una virtud en política", no es a su juicio lo preferible en este caso.
"Yo no lo voy a cuestionar, pero a mí me gusta Tardá y me gustaría que ERC fuera una fuerza con la que nos entendiéramos en Madrid pero también en Barcelona y en Cataluña. Eso seria bueno para Barcelona, Cataluña y para España", ha apostillado.
En este sentido, ha reclamado a ERC que "hay que trabajar para entenderse". "Sospecho que nuestras bases electorales además desean, desde el respeto a las diferencias, ese entendimiento", ha añadido.